David demostró que a la hora de la Copa Davis siempre da lo máximo. Luego de casi tres meses de inactividad, le ganó 6-4, 7-6 y 7-6 al ruso por los cuartos de final en Moscú
Con un arsenal de variantes, el unquillense David Nalbandian -por estos días en el puesto 153 del ranking- dejó de lado cualquier especulación respecto de sus cuatro meses de inactividad en el circuito -aunque sí mostró algunos altibajos propios de la falta de competencia-, volvió a mostrar su jerarquía jugando para su país y, en una sólida actuación, venció a Nikolay Davdyenko (N°6 del mundo) por 6-4, 7-6 (5) y 7-6 (6) para poner al conjunto que capitanea Tito Vázquez 1-0 arriba en la serie por los cuartos de final.
Ahora, el correntino Leonardo Mayer podrá a salir a jugar el duro enfrentamiento ante Mikhail Youzhny con algo más de confianza, sabiendo que en el peor de los escenarios, la Argentina se irá a dormir con la serie igualada antes de jugar el dobles mañana, desde las 7.
Fue un partido en donde el cordobés estuvo muy fuerte en el aspecto mental. Se recuperó de varios quiebres en contra y superó más de una laguna ante Davydenko. Además, como lo hace habitualmente, fue el mejor en los puntos importantes, los que definen los partidos.
En un set inicial con vaivenes, Nalbandian recuperó el quiebre en contra y, cuando tuvo una pequeña chance de golpear al ruso, ajustó su devolución para quebrarlo en el 10° game (sacó 5-4 y 40-15) y dar el primer paso en el match.
En el segundo, la remontada fue aún más cuesta arriba: sufrió dos quiebres al inicio, se vio abajo en el marcador 3-0 (con el saque de Davydenko), luego enfrentó la chance de que el ruso saque para set, igualó en 5 y, en el tie-break, estuvo 5 a 2 en desventaja. A todo eso se sobrepuso el unquillense para tomar una ventaja casi decisiva de dos sets a cero.
Luego, en el tercero, aceleró su ritmo y no cedió el protagonismo. Con un quiebre de entrada, administró inteligentemente su ventaja, pero hubo más quiebres. David perdió su servicio en el 8°, luego lo recuperó y sacó para cerrar el partido, pero dos voleas en la red le quitaron esa posibilidad. Finalmente, en un tie-break en el que levantó dos set-points, y tras 2h47m, el rey David volió a decir presente en la Copa Davis.