Las madres que dan a luz en sus viviendas se recuperan más rápido, pero sus hijos pueden sufrir muchos más problemas que les causen la muerte.
Un trabajo basado en casos de los Estados Unidos y Europa dioc omo resultado que los bebés que nacen en casas particulares tienen mayor riesgo de morir que los que lo hacen en los centros de salud.
Según el estudio, que fue realizado por Maine Medical Center, y publicado por el American Journal of Obstetrics and Gynecology en su edición digital, la mayor mortalidad está basada en los frecuentes problemas respiratorios, y también en fallos en los intentos de reanimación. En las madres, sin embargo, los partos caseros permiten una más rápida recuperación, de acuerdo a lo publicado por El País en su página web.
Los científicos revisaron datos de trabajos realizados en los Estados Unidos y Europa, que estudiaron 350 mil partos de bajo riesgo planificados para realizarse en casas y más de 200 mil nacimientos en hospitales.
Joseph R. Wax, uno de los autores del informe, explicó que si bien a las madres se les practican menos cesáreas y episotomías y vivieron un parto más satisfactorio, este tipo de alumbramientos se asociaron "con el doble de mortalidad neonatal y el triple si se excluyen los bebés nacidos con defectos congénitos".
Las principales causas de muerte fueron los fallos respiratorios y los problemas en la reanimación.
Los trabajos se realizaron en países de todo el mundo, en los que existe un nivel diferente de recursos disponibles para asistir un parto en una vivienda.