En fallo dividido, el máximo tribunal norteamericano amplió a todas las ciudades y Estados un veredicto del 2008. Gobiernos no podrán controlar su posesión
La Corte Suprema de Estados Unidos extendió este lunes los derechos de armas a todos los estados y ciudades del país, en un dictamen que involucra el veto a los revólveres existente hace 28 años en Chicago.
En una votación de 5 a 4 que se dividió entre líneas conservadoras y liberales, por primera vez la máxima corte de la nación extendió a todas las ciudades y estados su histórico veredicto de 2008, en el que señala que los ciudadanos estadounidenses tienen un derecho constitucional a poseer armas.
El derecho a portar armas, garantizado por la Segunda Enmienda de la Constitución estadounidense, anteriormente sólo aplicaba a las leyes y enclaves federales, como Washington D.C., donde la corte eliminó un veto similar a las armas en su mandato de 2008.
El derecho a las armas ha sido uno de los temas que más divisiones ha creado en el plano social, político y legal.
El derecho a las armas ha sido uno de los temas que más divisiones ha creado en el plano social, político y legal en Estados Unidos. Unos 90 millones de personas en el país norteamericano tienen un estimado de 200 millones de armas.
Se estima que Estados Unidos posee el mayor índice de pertenencia civil de armas. Las muertes por armas tienen un promedio de 80 por día, 34 de ellas homicidios, según estadísticas del gobierno estadounidense.
El veredicto, entregado el último día del mandato de la Corte Suprema, fue una victoria para cuatro residentes de la zona de Chicago, dos grupos de derechos de armas y la políticamente influyente Asociación Nacional del Rifle.
Fue una derrota para Chicago, que defendió su ley como un ejercicio razonable del poder local para proteger la seguridad pública. La ley y un veto similar en Oak Park, Illinois, eran las medidas más restrictivas de control de armas en el país.
"Sostenemos que el derecho de la Segunda Enmienda es completamente aplicable a los estados", concluyó el juez Samuel Alito sobre la mayoría en la Corte en el veredicto de 45 páginas.