Por Adrián Taccone, de la redacción de Asteriscos.Tv

Luego de tanta espera, ansiedad y expectativa, arrancó el Mundial de Sudáfrica 2010, con el color y la alegría de un continente que finalmente tiene su premio a tantos años de ostracismo y mirada esquiva del resto del planeta.

El inicio del mundial a nivel futbolístico dejó poco para rescatar.

En el Grupo A hubo dos empates, entre los locales y México, por 1-1, y el de Uruguay y Francia, sin goles.

Lo primero que se saca en limpio en el análisis es que este grupo es muy parejo y quizás algunos pronósticos previos quedarán hecho añicos en las próximas jornadas, sin que nadie se anime a decir cuáles serán los clasificados para octavos de final.

Se vio a una Sudáfrica con mucha entrega, con un típico estilo del brasileño Carlos Alberto Parreira, y sorprendió a México, que había empezado con ímpetu, pero se fue diluyendo.

El golazo de Siphiwe Tshabalala fue lo más bonito de la jornada, sumado a la vigencia de Rafael Márquez, quien salvó las "papas" del "vasco" Aguirre y marcó el empate, en un partido que podría haber tenido más goles.

Luego, en Ciudad del Cabo, Uruguay y Francia redondearon un pálido empate sin goles, donde privó más el cerrojo de la "celeste" y las pocas ideas de los "galos" para poder quebrar el cerco.

Las primeras jornadas, en especial las inaugurales, no suelen entregar lo mejor de sí por parte de los equipos.

Lo único que resta es rogar para que la suerte cambie y empiece el fútbol.

¿Llegarán con el debut de la Argentina?