Los activistas estaban presos desde el lunes, cuando atacaron los barcos con los que intentaban ingresar ayuda humanitaria a la Franja de Gaza
Mientras continúan las críticas mundiales por el cuestionado asalto de comandos israelíes a una flota de seis barcos que navegaba con ayuda humanitaria hacia la Franja de Gaza, las autoridades del Estado hebreo liberaron esta mañana a 450 de los 686 activistas que permanecían detenidos.
A primera hora, los detenidos que permanecían en la prisión de Ela, en la ciudad israelí de Beersheva, fueron llevados a aeropuertos y los cruces fronterizos con Jordania para ser deportados del país, informó la vocero de los servicios penitenciarios.
Entre las personas liberadas había 123 personas nacidas en países árabes, entre ellos Jordania, Kuwait y países con los que Israel no tiene relación diplomática, que fueron llevados al puente de Allenby, que comunica Israel con Jordania.
El resto, la mayoría de ellos turcos, fueron llevados al aeropuerto de Ben Gurion en Tel Aviv para ser deportados de inmediato. A tal fin, dos aviones especiales los esperaban para efectuar su traslado. En tanto, otros 186 activistas de la "Flota de la Libertad" seguían en la prisión de Beersheva tratando de cerrar los procesos de deportación.
Los que más dificultad están encontrando de parte de las autoridades israelíes son los pasajeros palestinos e israelíes. Estos siguen sometidos a interrogatorios y se desconoce cuál será el procedimiento que Israel llevará adelante con ellos. Ayer, unos 50 activistas ya habían abandonado voluntariamente el Estado hebreo.