El presidente de Bolivia le planteó al Papa sus diferencias con la jerarquía de la Iglesia boliviana y permitir a las mujeres ejercer el sacerdocio. ¿Aceptará la propuesta?
El presidente de Bolivia, Evo Morales, planteó al Papa Benedicto XVI sus diferencias con la jerarquía de la Iglesia boliviana, abolir el celibato, permitir a las mujeres ejercer el sacerdocio y la necesidad de defender a la madre tierra en resguardo de la vida y el planeta.
Morales, quien se definió como un cristiano de base, llevó estos planteos al Papa como parte de la necesidad de adoptar "una serie de reformas para el fortalecimiento de la fe y la recuperación de los feligreses de la Iglesia Católica"
El mandatario boliviano se entrevistó con el Pontífice en el Palacio Apostólico por aproximadamente 25 minutos según dijo en una conferencia de prensa a la conclusión del encuentro, citado por la Agencia Boliviana de Información (ABI).
En el encuentro, considerado por muchos expertos sin precedentes, el mandatario suramericano subrayó "la necesidad de una mayor sensibilidad social a favor de los derechos de la Madre Tierra".
Una nota oficial de la Santa Sede asegura que sobre este tema existen muchas coincidencias entre la Iglesia católica y las ideas que enarbola Morales, quien considera a esta entidad religiosa una aliada clave para impulsar los resultados de la conferencia mundial sobre los derechos de la Madre Tierra celebrada recientemente en Cochabamba, Bolivia.
"La Iglesia tiene la fuerza y el poder de pedir a los gobiernos el respeto de los compromisos internacionales para la defensa del medio ambiente", expresó Morales, citado por la agencia cubana Prensa Latina.
Tras ser rechazada la audiencia solicitada por Evo Morales en 2007, hoy fue el santo padre quien mostró interés por reunirse con el presidente boliviano.
En una carta entregada al Papa, el mandatario puntualizó que "es necesario iniciar un proceso de sinceramiento al interior de la Iglesia Católica para fortalecer su estructura y a fin de que responda a los verdaderos intereses sociales de los pueblos".
Igualmente invitó a Benedicto XVI a realizar una visita a Bolivia en una fecha próxima, lo que consideró que "fortalecerá la fe de los creyentes en este país andino".
Al reafirmar que profesa la religión católica, el presidente dijo que en su gestión tuvo "algunas diferencias con algunos jerarcas de la Iglesia Católica, que sentí que estaban haciendo política y no estaban orando por el pueblo boliviano. Como católico de base entendí que era importante la oración por el pueblo".
Agregó que la nueva Constitución Política del Estado de Bolivia garantiza la libertad religiosa, y con la Conferencia Episcopal de Bolivia "tenemos un acuerdo marco: por primera vez los colegios de convenio que están cargo de la Iglesia Católica son reconocidos legal y constitucionalmente".
Morales señaló en su carta que sus reflexiones lo llevan "a proponer, muy respetuosamente, la necesidad de superar la crisis de la Iglesia", que como el Papa dijo, "está herida por el pecado, para ello es imprescindible democratizar y humanizar su estructura clerical".
Agregó que expresó su preocupación "por los hechos que suceden casi permanentemente, conocidos por los medios de comunicación, lo que amerita impulsar profundos cambios estructurales, democratizar y humanizar la Iglesia Católica, para que no sigamos perdiendo feligreses".
"Democratizarla para que a todas las hijas e hijos de Dios, que son iguales ante sus ojos, se les reconozca los mismos derechos religiosos, y que las mujeres puedan tener las mismas oportunidades que los hombres para ejercer plenamente el sacerdocio", precisó en la misiva entregada al pontífice.
Añadió que, "como Jesús, que se hizo hombre, se humanizó para estar entre nosotros y entendernos mejor, la Iglesia no tiene que negar una parte fundamental de nuestra naturaleza como seres humanos, se debe abolir el celibato, así habrá menos hijas e hijos no reconocidos, así podremos sincerarnos ante la realidad".
"Del mismo modo y con mucha decisión debemos proteger a nuestros hijos e hijas de quienes valiéndose de la confianza que debe inspirar un sacerdote, abusan de ellos. Quienes cometen esas atrocidades pecan y también dañan", advirtió Morales.
Destacó el mandatario, que otro de los temas conversados con el Papa Benedicto XVI se refirió a la Conferencia Mundial de los Pueblos, relacionado a los derechos de la Madre Tierra.
En abril pasado, Bolivia fue escenario de la Cumbre Mundial de los Pueblos en defensa de los derechos de la tierra y de la vida en la que participaron miles de representantes de movimientos sociales e indígenas y de organizaciones internacionales que concluyeron se debe velar por la vida y la humanidad por encima de intereses mercantilistas de los países industrializados.