El futbolista francés Franck Ribéry rompió su silencio y habló por primera vez sobre el escándalo de prostitución en el que está envuelto junto a otros jugadores de la selección francesa, cuando falta poco más de un mes para el comienzo del Mundial de Sudáfrica.

"Todo esto ha herido a mi familia, a las personas que están cerca de mí, es lo único que quiero decir", dijo escuetamente el futbolista del Bayern Múnich en una entrevista con el canal deportivo francés "Orange Sport".

Tras las duras palabras de la secretaria de Estado de Deportes, Rama Yade, Ribéry también habló sobre su futuro en la selección nacional.

Yade había dicho el jueves que Ribéry no podría defender a los "bleus" si había un juicio contra él relacionado con el escándalo.

"La casaca de la selección es sagrada", dijo.

En el "affaire" en torno a una prostituta que era menor de edad en el momento de los hechos y que hoy tiene 18 años, están involucrados, además de Ribéry, varios jugadores de la selección francesa.

"Estoy orgulloso de ser francés. Siempre estoy feliz de poder jugar por mi país", dijo Ribéry, y aseguró que siempre se empleó "a fondo" en la selección y que es "un honor" vestir la camiseta nacional.

"Quiero ir a Sudáfrica y jugar el mejor Mundial posible", indicó.