El ruralista Eduardo Buzzi afirmó, en relación a las denuncias de corrupción en la relación con Caracas, que "para poder hacer negocio había que dejar plata en el camino"
El titular de Federación Agraria, Eduardo Buzzi, sembró otro paño de sospechas y dudas sobre las denuncias de corrupcion en los negocios de exportacion entre Argentina y Venezuela. "Yo repito lo que se decía en el ambiente, en especial entre los empresarios de la maquinaria agrícola: estos tipos (por los funcionarios kirchneristas que manejaban la relación comercial con Venezuela) son como los celulares y si no le pones el 15 antes no funcionan".
Si bien el rurralista, en diálogo con Clarín, negó conocer datos concretos sobre la existencia de estos presuntos ilícitos. Pero recalcó que entre 2004 y 2005, cuando su entidad coqueteaba con el kirchnerismo, intentó conformar grupos de pequeños y medianos productores para participar del naciente intercambio con el gobierno de Chávez: combustible por alimentos. "No pudimos cargar ni un grano de arroz, pero tampoco pusimos un peso ni ofrecimos una coima", enfatizó.
"La Federación Agraria ha hecho montones de intentos de vender alimentos a Venezuela y nunca pudo. Mientras tanto, escuchábamos en el ambiente los rumores que decían que para poder hacer negocio había que dejar plata en el camino. Son unos chantas, pero no tengo pruebas. Sino, hubiera ido a la justicia", aseguró Buzzi.
La sospecha de existencias de coimas en los negocios de exportación a Venezuela cobraron fuerza luego de que el ex embajador argentino en aquel país, Eduardo Sadous, declaró ante la justicia que un par de empresarios argentinos, de modo informal, se habían quejado ante él por esos pagos irregulares. La causa está a cargo del juez Julián Ercolini, quien en los próximos días citaría a varios hombres de negocios para chequear esas versiones.
Buzzi calificó de "llamativos" la incontables viajes que los ex secretarios de Agricultura, Javier De Urquiza y Carlos Cheppi (hoy embajador plenipotenciario de la Cancillería) realizaron durante varios años a Venezuela. También reconoció que él mismo viajó a principios de 2005 en ocasión de la primera ronda de negocios entre empresarios de ambos países. Todavía no había llegado el cierre de las exportaciones de carne (en marzo de 2006) ni el intento por imponer retenciones móviles (marzo de 2008). Y la Federación Agraria se contaba entre las organizaciones cercanas al Gobierno de Néstor Kirchner. Agricultores Federados Argentinos (AFA) era la cooperativa que podía vender soja y otros granos. También estaban interesados en exportar arroz del litoral y porotos del norte.
"Nos subieron a un charter y fuimos a Isla Margarita. Eramos un montón de empresarios, Después pasamos cotizaciones, pero nunca se pudo hacer nada con los venezolanos. Tampoco con Cuba. Quien le vende hoy la soja a Venezuela es Cargill y no la Federación Agraria de pequeños productores. Ese es el gobierno nacional, popular y progresista", se quejó el ruralista.
Buzzi recordó que igual suerte corrieron proyectos que su entidad acercó en aquellos años al ministro, Julio De Vido. "Hemos sido siempre proscriptos. Una vez lo fuimos a ver a De Vido para proponerle poner 30 plantas de biodiesel en el Norte. Hicieron una comisión y nunca le dieron importancia", recordó.