La presidenta Cristina Kirchner dijo hoy que "pretender soberanía a 14.000 kilómetros es un ejercicio de colonialismo, no de soberanía".

Además, calificó a la cuestión de "bochorno y disparate", al encabezar en Ushuaia el acto central de conmemoración del 28 aniversario de la guerra de las Islas Malvinas.

La Presidenta pidió que "cada país respete las fronteras del otro" y cuestionó que Gran Bretaña no acate las resoluciones de las Naciones Unidas por la soberanía de las Malvinas.

Cristina criticó a ese país que, dijo, "por el solo hecho de tener un sillón en el Consejo de Seguridad de la ONU no respeta las resoluciones de la ONU", y consideró que "este doble estándar del derecho internacional tiene que ser revisado".

"Porque sino tal vez les será aplicado en otros ámbitos, en otros lugares y en situaciones más graves y conflictivas", advirtió.

Cristina propuso "universalizar la cuestión de Malvinas", ya que "debe ser un ejemplo universal del mundo que queremos".