Tras casi dos horas de sesión, el bloque oficialista abandonó la sesión preparatoria en la que se iba a definir el reparto de poder en el Senado, en la que la oposición esperaba poner fin a más de seis años de hegemonía kirchnerista en el control de la Cámara alta.

Con sólo treinta y seis senadores en sus bancas, uno menos que el número necesario para poder votar, la oposición permaneció varios minutos más en el recinto del Senado antes de dar por terminada la sesión sin poder tratar el proyecto de distribución de comisiones que habían consensuado los distintos bloques no oficialistas.

Tras los duros discursos de senadores opositores le tocó el turno al jefe de la bancada kirchnerista, Miguel Angel Pichetto, quien anunció la estrategia oficial. Luego de asegurar que a los legisladores no oficialistas les interesa "cogobernar", el rionegrino adelantó que se retirarían del recinto.

"Como no tienen quórum y no tienen la mayoría, nosotros nos vamos a retirar para llegar a una solución responsable", afirmó. Segundos después desapareció la tropa kirchnerista, lo que frustró la posibilidad de definir la composición de las comisiones en el Senado.

La indignación fue inmediata. "Lamentamos la actitud del bloque del partido de gobierno. Vamos a aprobar la propuesta", dijo el senador radical Gerardo Morales y añadió: "El Poder Ejecutivo va a tratar de impedir que este Senado funcione y trate los temas que tiene que tratar. Que sea mañana, la semana que viene, en dos semanas. No vamos a permitir que no funcione el Senado".

En su justificación, Pichetto había señalado que la oposición cuenta con "una mayoría exigua de un senador más" y que eso no le daba derecho "a tener la mayoría en todas las comisiones".

"Somos vulnerados, no solamente acá. En la Cámara de Diputados también. Se olvidan de que nuestro sistema es presidencial", concluyó el titular del bloque del FPV.

Autoridades. Como primer paso de la sesión, por unanimidad, los senadores ratificaron en su puesto de presidente provisional de la cámara a José Pampuro, del oficialismo. En la vicepresidencia del cuerpo fue nombrado el radical pampeano Juan Carlos Marino.

Pasada la votación de las nuevas autoridades, comenzó la discusión por la integración de las comisiones. El kirchnerismo reclama la mayoría, es decir, ocho miembros, en las comisiones de gestión, consideradas clave. Se trata de las de Presupuesto y Hacienda, de Asuntos Constitucionales, de Acuerdos, de Defensa y de Relaciones Exteriores.

La oposición, en cambio, pretende la presidencia de 13 de las 25 comisiones permanentes, las llamadas "de control", y quedarse con la mayoría de todos esos cuerpos de trabajo, es decir, 8 de los 15 senadores que integran cada uno.

Pese a que se esperaba que la oposición cuente con 37 votos, mayoría suficiente para votar en el recinto, la ausencia sorpresiva del ex presidente Carlos Menem frustró los planes de los bloques no oficialistas.

Ocurre que el senador está en La Rioja y todavía no hay certeza sobre si viajará a Buenos Aires para participar de la sesión.

Según pudo saber lanacion.com de sus allegados, el ex presidente permanece en su provincia y sus próximos pasos son un misterio.

Cumpliendo el orden del día aprobado ayer, primero se le tomó juramento a la senadora Norma Morandini (Frente Cívico-Córdoba), que no había podido asumir en diciembre junto con el resto de sus pares por estar de viaje.