Más allá de las formalidades de la convocatoria del gobierno, los empresarios invitados a almorzar con la presidenta Cristina Kirchner concurrirán sin grandes expectativas sobre un posible anuncio o adelantos sobre medidas que el Gobierno tomará.

"No tenemos expectativas sobre ninguna cosa concreta, aunque el diálogo en sí es conveniente -dijo un industrial que prefirió el anonimato-. No creo que haya algún anuncio; lo que sí habrá es una agenda de trabajo para empezar a destrabar cosas que hoy no funcionan."

De la reunión de mañana participarán varios miembros del gabinete, entre ellos los ministros de Planificación, Julio De Vido; Industria, Débora Giorgi, y Economía, Amado Boudou. Ayer, Boudou tanteó el clima con el que se encontrarán en una reunión reservada con la cúpula de la Unión Industrial Argentina (UIA). En ese desayuno de trabajo, el presidente de la organización, Héctor Méndez, fue acompañado por Luis Betnaza (Techint), Federico Nicholson (Ledesma) y José Ignacio de Mendiguren.

Los empresarios plantearon allí su preocupación por algunos cuellos de botella que obstaculizan el crecimiento de las fábricas, volvieron a pedir una ley de reinversión de utilidades para las pymes y pidieron reducir "el ruido político" que afecta el clima de negocios, contaron testigos de la reunión.

Boudou pidió que aumenten el nivel de inversión, "porque hay mercado y rentabilidad", y logró que sus interlocutores reconocieran que había una mejora en la situación económica.

El ministro aprovechó para defender las bondades del Fondo del Bicentenario, un dato no menor de cara a la reunión de mañana con la Presidenta. Es probable que el Gobierno busque allí un respaldo de los hombres de negocios a la medida, con el argumento de que mejorará directa o indirectamente sus posibilidades de financiación.

Fuentes oficiales confirmaron que en Olivos no se escucharán anuncios de medidas concretas, sino una serie de enunciados generales sobre el modelo económico y un pedido para que los empresarios contribuyan a generar una especie de "shock productivo".

Las medidas, que sí se están preparando y entre las cuales habría algún relanzamiento de líneas oficiales de crédito, se anunciarán después de la reunión de Cristina Kirchner con empresarios. Las fuentes consultadas indicaron que la Presidenta simplemente los exhortará a cambiar las expectativas económicas y contribuir a la superación de la crisis.

Por ahora, la mayoría de los empresarios que confirmaron que asistirán desconocen si hay algo más que aquellos enunciados. "Sí voy a ir, pero la verdad es que no conozco de qué se va a hablar.

Vamos sin ninguna expectativa en especial", dijo Juan Carlos Lascurain, ex titular de la UIA y actual presidente de la Asociación de Industriales Metalúrgicos. El empresario se reunió ayer con otro de los ministros que estarán en el almuerzo, Giorgi, aunque la excusa fue analizar la continuidad del régimen de incentivo a la fabricación de bienes de capital.

La convocatoria estuvo dirigida a los empresarios que ya habían participado en diciembre de la cena que ofrecieron Néstor y Cristina Kirchner. En aquella oportunidad concurrieron Betnaza, Jorge Brito, Luis Pagani, Eduardo Elsztain, Enrique y Sebastián Eskenazi, Eduardo Eurnekian, Aldo Roggio, Carlos Bulgheroni, Alfredo Coto, Gerardo Werthein, Viktor Klima, Eduardo Costantini y Marcelo Mindlin, entre otros.