El ministro de Economía y Finanzas, Amado Boudou, reconoció tácitamente que Néstor Kirchner compró 2.000.000 de dólares en octubre de 2008, días antes de la crisis financiera mundial.

"Me llama la atención que esto sea permanentemente objeto de comentario, ya que lo que habría que buscar son aquellos que no declaran sus bienes e ingresos", sostuvo Boudou en declaraciones a radio América.

En defensa de la situación del ex presidente y actual diputado nacional, argumentó que "las operaciones (de compraventa de dólares) que se hacen en el mercado formal, son legales y esto está hecho en esos términos; allí no hay nada que decir".

El funcionario afirmó que "los bienes y movimientos de Kirchner, los ha hecho todo en los mercados formales y está todo en sus declaraciones" juradas presentadas ante las autoridades impositivas".

En la misma línea, afirmó que "sobre las listas" publicadas durante el fin de semana por diarios porteños compuestas por personas y entidades gremiales que adquirieron grandes cantidades de dólares previo a la crisis financiera, "si alguien cometió un ilícito, quien tenga conocimiento, tendría que ir a denunciarlo".

Boudou afirmó: "La dinámica de esto fue una amenaza a partir del Diario Clarín del señor (Martín) Redrado, que iba a dar a conocer las listas" de 'amigos del poder' que adquirieron divisas durante la crisis internacional.

"Luego éste dijo que no había dicho eso, y finalmente aparecieron algunas listas", explicó.

Pero el diario que publicó más en detalle la información fue Perfil, además del sitio Lapoliticaonline, lo cual no cierra totalmente con la hipótesis del ministro.

Por su parte, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, sostuvo que "no fue una compra en negro, fue legal", lo cual nadie cuestionó, ya que lo que está en tela de juicio es si es ético que el esposo de la presidenta de la Nación especule con el dólar.

Aníbal machacó: "No hubo ningún cambio que pueda indicar que haya sido beneficiado en nada".

Cuando se le preguntó por la demanda judicial que hará la oposición contra Kirchner, Fernández apeló a su vocabulario clásico: "Es una estupidez, porque esto ya fue analizado; está dentro del marco de la propia declaración jurada que ya se revisó". "Que lleven lo que quieran llevar (a la Justicia). Está todo bancarizado. Es muy fácil seguir la ruta del dinero y saber qué fue lo que se hizo y para qué se utilizó", remató.

La oposición y varios economistas no ven la situación de la misma manera que Boudou. Consideran que si bien la compra sería legal, ya que en nuestro país cualquier individuo puede adquirir divisas hasta dos millones de dólares si tiene cómo justificarlo, considera que se habría cometido una "violación ética" ya que manejaba información confidencial.

El abogado penalista Juan Pablo Vigliero aseguró que existiría una violación al artículo 2 del Código de Etica de la Función Pública, porque la "información privilegiada" a la que habría tenido acceso Kirchner debió de "provenir de un funcionario dependiente del Ejecutivo o directamente de la presidenta".

Su colega Adolfo Tamini, por su parte, descartó la posible existencia de un delito, dado que Kirchner no era funcionario público en el momento de la compra de las divisas. "No veo ningún tipo penal en este caso. Es una conducta legal pero sancionable social y políticamente", destacó.