Chile inédito: Piñera y Frei dieron conferencia juntos
En un acto de civismo ejemplar, el electo presidente de Chile y su rival salieron junto a hablar y pidieron la unidad de todos los chilenos y mirar al futuro
17 de enero de 2010
Chile tiene un motivo más para ser un ejemplo para el mundo. En un episodio inédito casi en la política mundial, el electo presidente chileno, Sebastián Piñera, y su rival Eduardo Frei, brindaron juntos una conferencia de prensa en la cual se confirmó el retorno de la derecha al poder en el país trasandino.
Por primera vez desde que Augusto Pinochet dejó el poder, la derecha triunfó en las elecciones chilenas. Claro que se trata de otra derecha, respetuosa de los derechos civiles y con ganas se seguir transformando a Chile en un imán de inversiones para el mundo, garantizando la seguridad jurídica.
Piñera pronunció sus primeras palabras como presidente electo en una conferencia de prensa junto a Frei.
"Vamos a tener una oposición leal y constructiva. Te agradezco Eduardo [por Frei] y a tu familia por la campaña que han hecho. Nuestro país necesita unidad hoy más que nunca", dijo el nuevo mandatario chileno.
Y añadió: "Quiero revivir la democracia de acuerdos". Ambos candidatos enfrentaron a los medios con sus familias.
"Pedí una oportunidad para demostrar que las cosas las podemos hacer mucho mejor, recuperar nuestra debilitada capacidad de crecimiento y generación de empleo y para ganarle por fin la batalla a la delincuencia y al narcotráfico, para mejorar la calidad de la salud y la educación de nuestros hijos", afirmó.
Piñera prometió que "no va a haber tabla rasa del pasado y de la obra que han construido los chilenos que nos han antecedido".
En una alusión a los últimos cuatro gobiernos, Piñera agradeció "lo mucho bueno que han hecho los gobiernos de la Concertación durante los últimos 20 años".
"El cambio llegó porque así lo ha querido una nueva mayoría de los chilenos", aseveró.
Piñera anticipó "un Estado fuerte y eficiente, con mucho músculo y poca grasa, que ayude a los más necesitados, a la clase media y promueva la imaginación y el emprendimiento".
"Vamos a hacer un gobierno de unidad nacional, que va a derrotar los muros que nos dividen y (construir) los puentes que nos van a unir en el futuro", subrayó, prometiendo que en su gobierno trabajarán "los mejores, más preparados, más honestos y con mayor vocación de servicio público al servicio de todos los chilenos".
En una alusión a la dictadura de Augusto Pinochet y la transición de 20 años que la siguió, Piñera afirmó que "la democracia que recuperamos a fines de los 80 ha dado un nuevo y gran paso demostrando su madurez y su solidez".
Antes, el ex presidente y candidato oficialista había aceptado la derrota: "Chile es mucho mejor que ayer. Ahora seremos los guardianes de la libertad".
Los primeros datos ya daban cuenta de una pequeña ventaja de Piñera. Más tarde, con el 99,2 por ciento de las mesas escrutadas, según informó oficialmente el gobierno, el candidato de la derecha se imponía con el 51,61% de los votos sobre el postulante de Gobierno, que obtuvo el 48,12%.
Tras cumplir con el deber electoral, la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, la mandataria había llamado a los chilenos a votar temprano y esperar con tranquilidad los resultados.
Consultada sobre si iba a saludar al presidente electo, de resultar ganador el conservador Piñera, señaló que "todos los gobiernos democráticos desde 1990 han mantenido una tradición republicana y esta presidenta la va a mantener: a la hora que haya certeza, llamaré al presidente electo y mañana todos los poderes del Estado saludarán al presidente".
El gobierno chileno destacó este mediodía la "completa normalidad" en la que transcurrían los comicios.