"Yo soy el responsable", dijo el presidente de los Estados Unidos, al realizar una autocrítica tras presentar las investigaciones sobre el atentado fallido de Navidad
El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, presentó los primeros resultados de las investigaciones sobre el atentado fallido de Navidad. El mandatario realizó una fuerte autocrítica.
"Yo soy responsable, y cuando el sistema de seguridad fracasa, yo soy responsable", aseguró Barack Obama en una de las autocríticas más duras que debió realizar durante su gestión.
De acuerdo con el mandatario, del proceso de evaluación se desprende "que no se trata de culpar a un individuo, (sino que) se trata de una falla sistémica".
"La inteligencia después del ataque del 11-S funcionó pero no es lo que ocurrió el día de Navidad. La comunidad de inteligencia había aprendido mucho de Al Qaeda en Yemen, sabían que iban a atacar a los EEUU, pero la inteligencia no actuó y no le dio prioridad a un ataque aquí", explicó el presidente norteamericano sobre las conclusiones de las primeras investigaciones por el intento de atentado por parte de un joven nigeriano en un avión de Delta con destino a Detroit.
De este modo, el Jefe de Estado nortemaericano señaló que ese error "contribuyó a un fracaso para conectar todos los puntos de la comunidad de inteligencia que hubiera revelado que el joven estaba planeando un ataque".
"También hizo que hubiera una falla en la lista de pasajeros", agregó el mandatario.
En ese marco, Obama aseguró que "tomamos una acción y medidas prontas después del intento de ataque, por mejorar la información".
Asimismo, instruyó a las agencias de seguridad a "investigar las pistas de amenazas potenciales para poder actuar con fuerza", al tiempo que añadió: "Debemos seguir las pistas que tenemos hasta desbaratar cualquier plan de ataque".
"También vamos a reforzar los criterios para tener nombres en las listas de exclusión de pasajeros, para tener los aviones seguros sin molesatar a los pasajeros", indicó el mandatario respecto de uno de los puntos más polémicos en las fallas de seguridad, dado que el joven Umar Farouk Abdul Mutallab ya se encontraba en una lista de sospechosos.
Sin embargo, Obama reconoció que "aún la mejor inteligencia no puede identificar a todos los individuos que quieran atacarnos".
Por ese motivo, "en alianza con otros paises, vamos a intentar evitar el ingreso de terroristas" a los Estados Unidos, afirmó el Jefe de Estado.
"No hay garantía de que todos los vuelos que lleguen a los EEUU sean seguros, por eso debemos reforzar los sistemas de inteligencia, invirtiendo millones de dólares", reiteró.
De este modo, anticipó que pedirá "al Departamento de Seguridad Interior que tome medidas adicionales, como dispostivos de imagen y trabajar con el Departamento de Energía para mejorar la detección de metales".
"Vamos a ser bien claros, estamos en una guerra, estamos en guerra contra Al Qaeda, (que) son los que nos atacaron el 11-S, y nos siguen atacando. Hemos visto que realizamos progresos. Hemos apresado lideres en Yemen, hemos evitado nuevos complots y ataques", explicó Obama, quien consideró que "la mayoría de los musulmanes rechaza a Al Qaeda, pero (el grupo terrorista) sigue intentando reclutar".
"Debemos trabajar juntos con la seriedad que exige. Significa que debemos ser fuertes frente al extremismo violento", concluyó.