Es el club que tuvo a "Pepe" Amalfitani, gran hacedor de esta historia deportiva. Ganador de 6 títulos en fútbol y la gloria mundial de la mano de Bianchi
Hace 100 años comenzó a escribirse la historia del Club Atlético Argentinos de Vélez Sarsfield, cuando tres hombres se refugiaban de la lluvia en la estación de tren con dicho nombre (hoy estación Floresta).
El 1° de enero de 1910, más precisamente en la casa de Nicolás Marín Moreno, quien recibió a sus amigos Martín Portillo y Julio Guglielmone, le dieron forma a una pequeña ilusión que en la década de los 90 demostró y aún sigue demostrando su grandeza.
El primer presidente designado del club fue Luis Barredo: en sus inicios, Vélez tuvo dos equipos: uno en Tercera y otro en Cuarta división. La idea de jugar en una cancha marcada siempre estuvo presente, por eso jugaban de local en un potrero ubicado entre las calles Ensenada y Provincias Unidas (hoy la avenida Juan Bautista Alberdi).
Los arcos eran desarmables y en lugar de vestuarios había árboles con biombos. En 1912 Vélez se afilió a la Asociación Argentina de Football y comenzaron algunos cambios: la remeras blancas, a las que todos tenían fácil acceso en sus casas, fueron reemplazadas por unas azul marino con pantalones cortos blancos.
Por problemas con los de la Asociación, los dirigentes del club decidieron desligarse de la misma, y se incorporaron a la Federación Argentina de Football.
Un año después se incorporaron 10 socios, entre ellos José Amalfitani, y en una reunión de Comisión Directiva decidieron abreviar el nombre al que tiene en la actualidad.
Desde 1913, Vélez buscó un lugar donde asentarse: ese mismo año alquilaron unos terrenos sobre la calle Talpaqué en Mataderos, después se mudaron a Villa Luro.
Once años después con Amalfitani en la presidencia se inauguró el Fortín de la calle Basualdo, donde cuatro años después se jugó el primer partido nocturno entre un Combinado argentino y el Seleccionado nacional subcampeón de los Juegos Olímpicos de Amsterdam 1928.
En 1933 se empezó a utilizar la actual "V" Azulada. Esta fue diseñada para un equipo de rugby que nunca la fue a retirarla.
El comerciante que las tenía, se las propuso a los dirigentes del club que no tardaron en aceptar la propuesta, así en 1940 se sufrió el único descenso y también el desalojo del Fortín.
Don Pepe Amalfitani trabajó por su club y consiguió la cesión del pantano Arroyo Maldonado en Liniers y lo rellenó para levantar un nuevo estadio.
Fue así que el 11 de abril de 1943 se inauguró con la compensación de su esfuerzo fue la satisfacción del regreso a Primera ese mismo año.
Ocho años después el cemento vistió Liniers. Para el Mundial 78 se volvió a refaccionar y actualmente es considerado como uno de los estadios más lindos y seguros del país.
En 1968 Vélez consiguió su primer título, tras ganar el Nacional, en una emocionante definición con River y Racing.
Los referentes de aquel equipo eran: Marín, Gallo, Willington y Wehbe. Después vinieron 25 años de frustraciones con subcampeonatos bajo el brazo: en el Metro 71 y 79 y también en el Nacional 85.
A medida que los años pasaban el club se iba haciendo cada vez más grande y no sólo se crecía a nivel institucional sino también en lo deportivo. Con el máximo goleador de la historia del club, Carlos Bianchi como técnico Vélez obtuvo el Clausura ´93 (tras empatar con Estudiantes 1-1 en la 18° fecha.), Libertadores´94 (luego de ganarle 5-3 por penales a San Pablo en el Morumbí) e Intercontinental ´94 (aquel 1 de diciembre cuando venció 2-0 al Milan en Tokio).
A partir de ahí Vélez no paró de crecer. Con líderes en el equipo como Chilavert, Trotta, Cardozo, Bassedas, Asad y otros más. Fueron quienes le dieron al club la etapa más gloriosa de su historia.
En los ´90 dominaron numerosos torneos tanto nacionales como internacionales: Apertura ´95, Interamericana ´96, Clausura ´96, Supercopa ´96 y la Recopa Sudamericana ´97 y Clausura ´98, este último con Marcelo Bielsa como DT.
Luego de siete años Vélez volvió a la gloria, tras consagrarse campeón del Clausura 05. Con Miguel Angel Russo a la cabeza y con Castromán, Zárate y Somoza como referentes dentro de la cancha. Los de Liniers volvieron a sumar sexto título local.
El año pasado festejaron un nuevo campeonato: el Clausura ´09. Si bien Vélez lleva un siglo de vida, siempre se lo consideró como un club chico.
Pero su historia demuestra lo contrario, porque tuvo y tiene una dirigencia que fue capaz de hacerlo crecer y hacerlo grande.
Pero además Vélez no es solamente fútbol, hay un montón de deportes en los que se trabaja para seguir creciendo como club .Hay que destacar que los títulos de estos últimos veinte años respaldan y confirman el trabajo que se realizó durante 100 años.