El ex ministro de Educación porteño, Abel Posse, desmintió que Mauricio Macri le haya pedido la renuncia y dijo que decidió irse "por el inédito escándalo nacional" desatado tras su asunción.

"Mauricio (Macri) no me pidió la renuncia de ninguna manera, decidí irme yo ante el inédito escándalo nacional que se produjo con mi llegada al cargo. Lamentablemente esta es la realidad que vivimos, con la prepotencia disfrazada de democracia", manifestó Abel Posse en diálogo con Radio 10.

Posse aseguró que veía "que se venía el mes de marzo y no se llegaba a nada" y ante la "cobardía general", decidió dejar su flamante cargo.

Tras su abrupta salida del Ministerio de Educación de la ciudad de Buenos Aires, Posse apuntó contra la "intolerancia" de los gremios docentes y "la falta de apoyo de la clase política" argentina.

"Lo que pasó conmigo fue una especie de explosión, un problema nacional, no fue algo normal. Pensé que tendría la solidaridad de los partidos políticos, aunque sea de los vencedores del 28 de junio, pero me equivoqué", sostuvo.

"Me fui a los 10 días de asumir, porque no quiero irme muerto a los 40. No voy a esperar que Tito Nenna (Francisco, legislador porteño y ex gremialista) me pegue en la puerta de un colegio, no tengo porque ser un héroe solitario", puntualizó sobre el repudio sufrido por parte de los sindicatos.

El ex embajador lamentó que "el país está al borde de la anarquía" y comparó la presión ejercida por los gremios docentes para su salida con los paros de los sindicalistas del subte: "Estamos en el horno, acá un grupo de 25 agitadores me insultaron pidiendo mi renuncia y hace poco 15 personas dejaron sin subte a un millón de personas un día de verano a las tres de la tarde".