La joven trasplantada respira por sus propios medios
La salud de Pilar Chávez evoluciona favorablemente tras la operación. Se aguarda el nuevo parte médico
20 de noviembre de 2009
La evolución favorable de la salud de Pilar Chávez, la joven de 19 años a la que ayer se le realizó el segundo trasplante de hígado, se vio reflejada en la noticia de que los médicos le retiraron el respirador artificial y ahora lo hace por sus propios medios.
Sin embargo, a pesar de los primeros signos favorables luego de la operación, entre los familiares y amigos reina la cautela, en sintonía con el mensaje de los médicos de que hay que esperar unas 48 horas para confirmar el éxito del nuevo trasplante.
La joven, de 19 años, padecía una enfermedad metabólica de nacimiento llamada glucogenosis. Hace algunos años su enfermedad hizo que necesitara atención médica cada vez con más frecuencia, hasta que en 2007 entró en lista de espera para un trasplante de hígado.
Finalmente, el órgano llegó el viernes pasado por la noche. Al día siguiente, Pilar fue trasplantada, pero el domingo último su cuerpo comenzó a rechazar el órgano, por lo que, actualmente, la única opción que podía salvarle la vida era un nuevo trasplante de hígado, que finalmente se efectuó ayer con éxito.