Lo aseguró el fiscal de la causa, Alberto Nisman. También dijo que todavía no hay certezas de que el jefe de gobierno porteño esté involucrado en las escuchas
El fiscal Alberto Nisman adelantó que el ex jefe de la Policía Metropolitana Jorge “Fino” Palacios podría afrontar una pena de hasta 25 años de cárcel si se comprueba su participación en el espionaje a políticos y organizaciones civiles .
Nisman, a cargo de recavar información al respecto, señaló además que aún no hay pruebas suficientes para involucrar en las escuchas telefónicas al jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.
El hombre que el martes pasado solicitó la detención de Palacios al juez de la causa, Norberto Oyarbide, sostuvo que el ex policía “tiene una expectativa de pena de hasta 25 años de prisión” dado que “es un delito grave por las falsedades ideológicas” que le imputan.
"Fue Palacios quien ordenó e implementó la escucha a (el dirigente de Familiares de las Víctimas del Atentado a la AMIA) Sergio Burstein y que fue el organizador de una vasta red de interceptaciones telefónicas ilegales”.
"La prueba que hay hasta ahora es que la cabeza mayor es Palacios y que lo hizo exclusivamente para él", aunque aclaró que "hay mucha prueba para analizar", mientras que sobre Macri dijo que "todavía no hay ninguna certeza” de su participación.
Para Nisman, Palacios actuó “en complicidad” con los jueces misioneros Horacio Gallardo y José Luis Rey, y afirmó que estos dos últimos "deben estar detenidos porque lo único que hacen ahora es obstruir el acceso a la prueba".