El vicepresidente dijo que "hay que aportar cordura y racionalidad", en medio de las denuncias del oficialismo. Advirtió que el crecimiento de la Argentina "se acerca al cero"
El vicepresidente Julio Cobos volvió a salir a cruzar al kirchnerismo. "No hay conspiración ni desestabilización", sentenció esta tarde el mendocino en medio de las reiteradas denuncias de la plana mayor del oficialismo -la presidenta Cristina Fernández, gobernadores, ministros, legisladores, sindicalistas y piqueteros- sobre las presuntas intenciones desestabilizadoras que se esconderían detrás de las últimas protestas.
"No creo que haya un proceso de desestabilización", enfatizó Cobos en declaraciones que formuló ante un grupo de periodistas en La Plata, donde participó en un coloquio organizado por la Fundación Sergio Karachoff, vinculada al ex diputado nacional Federico Storani.
El vicepresidente evitó además polemizar con el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, quien lo había mencionado como uno de los dirigentes que con su conducta afecta la estabilidad institucional. "Hay que aportar cordura, racionalidad, no voy a contestar estos agravios", respondió cuando fue preguntado al respecto.
Cobos también ratificó sus aspiraciones presidenciales –señaló que la primera magistratura "es el deseo de todo hombre político que ya ha sido gobernador de una provincia"- y que, eventualmente, sería candidato por la UCR –"Mi pertenencia siempre fue el radicalismo", recalcó-. De todos modos, insistió en que seguirá ocupando su cargo actual "hasta el último día" de su mandato.
En otro orden, advirtió que "el crecimiento de la Argentina se acerca al cero". Y aunque señaló que eso "es mucho más que otros países desarrollados", también "ha originado desempleo y falta de expectativas". "Hay que tratar de resolver los conflictos de la mejor manera", pidió y añadió: "Estoy transmitiendo el mensaje de que tenemos derechos a protestar, sin afectar el derecho de los demás".