Aunque ya tenía un aval previo de Diputados y Senadores, un cambio en el articulado provocó varias suspensiones para que la Cámara baja tratara nuevamente la ley que establece nuevos gravámenes para los productos electrónicos que no hayan sido fabricados en Tierra del Fuego.

La gobernadora fueguina Fabiana Ríos venía insistiendo con la sanción de la ley. Sus legisladores, tanto en Diputados como en Senadores, se alinearon con el Gobierno para conseguir que se sancionara esta norma. Esta tarde lograron los 126 votos para imponer la nueva legislación. El socialismo, la Coalición Cívica, algunos radicales y la centro izquierda se abstuvieron de votar. Y los peronistas disidentes bonaerenses votaron en contra.

Con el objetivo de promover un polo tecnológico en la provincia fueguina (cuyas cuentas públicas están muy deterioradas, con un alto rechazo a la gestión de Ríos y conflictos sindicales al por mayor), el Congreso dispone la aplicación de un aumento impositivo a los bienes electrónicos producidos fuera de la provincia austral.

Los fueguinos hubieran tenido su ley antes de no ser por la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Senadores. Allí se había modificado un artículo (el 21) que llevó de 6.000 a 18.000 frigorías la protección impositiva para los aires acondicionados. Esa disposición favorecería a una empresa en particular.

La nueva ley modifica los impuestos internos y el IVA que correrán para teléfonos celulares, PC, monitores, televisores y otros artículos electrónicos que no hayan sido fabricados en Tierra del Fuego

La cámara que representa a la industria informática (Cicomra) manifestó su oposición a la nueva ley, al igual que las principales fabricantes de teléfonos celulares.