El ministro de Economía afirmó que "la gran apuesta de 2010 tiene que ser a la economía real". Además, pronosticó que el año próximo a la Argentina le irá "muy bien"
"Tenemos un 2010 que va a venir muy muy bien", dijo hoy el ministro de Economía, Amado Boudou, en una emisora de televisión, donde también aconsejó que "aquel que pueda invierta en la economía real, que mejore su casa, que la amplie, que cambie de casa".
El dólar "es mala idea", dijo. "Tenemos que apostar al crecimiento de nuestra economía, se puede invertir en la Bolsa en empresas argentinas, también se puede ir a los plazos fijos en pesos, que sirven para fomentar el crédito, pero yo creo que la gran apuesta de 2010 tiene que ser una apuesta a la economía real".
Además, dijo que "para el acceso al crédito, el año pasado hicimos un esfuerzo muy importante con el Banco Hipotecario, y también todo esto que estamos haciendo vinculado a los holdouts y canje de bonos y cuestiones financieras, el objetivo es que vaya bajando la tasa de interés para todos".
Por otra parte, destacó el desempeño y recuperación de la industria automotriz, al calcular: "vamos a terminar vendiendo 500 mil (unidades) entre toda la industria, es muy muy bueno". Boudou valoró también "la recuperación del salario real" y que "las jubilaciones subieron 20 por ciento este año"; en tanto aseguró que el Gobierno seguirá "cuidando el tema de los precios lo más posible y trabajando en acuerdos de precios, las grandes cadenas se han comprometido".
Respecto del conflicto por el intercambio comercial con Brasil dijo que "la presidenta se puso muy firme porque tenía que ver con cuestiones regionales, con fruta". "Como son alimentos perecederos rápidamente trabajamos desde la Cancillería y con Débora Giorgi en el Ministerio de Industria, para que rápidamente se destrabara esto y sigamos discutiendo, siempre va a haber temas para discutir, pero es nuestro principal socio comercial", sostuvo.
Por último, confió en el consenso en el Congreso para la aprobación del proyecto para modificar el monotributo, que contribuirá a "mejorar la jubilación y el sistema de salud" y elevará "a 3 millones" el número de monotributistas, actualmente en algo más de 2 millones.