El personaje creado por Roberto Fontanarrosa llega al cine con las voces de Pablo Echarri y Nancy Duplá. Primera película nacional de animación en 3D. Vea el trailer
Un estreno esperado, no solo por los fanáticos del personaje creador por Roberto Fontanarrosa, sino también por los amantes del cine de animación en Argentina que tienen en "Boogie, el aceitoso", una excusa fantástica para mostrar la capacidad en este tipo de cine y el primer estreno nacional de 3 D.
Desde este jueves, en todo el país se podrá ver finalmente, luego de mucha expectativas, este film nacional dirigido por Gustavo Coba y que tiene como protagonistas en las voces de Boogie a Pablo Echarri y en la heroína a Nancy Duplá.
Así como el trazo de Fontanarrosa engendró a un entrañable Inodoro Pereyra, concibió también a un "monstruo" como Boogie, el aceitoso, asesino a sueldo que sin dilemas éticos es capaz de humillar mujeres o torturar a ancianos sin el mínimo sentimiento de culpa.
Este matón de papel se corporizará en pantalla grande y a 37 años de la primera publicación en la revista Hortensia.
La animación no escatima en la violencia -para muchos obscena- de ese personaje que parodia las zonas más oscuras del ser humano.
El propio "Negro" Fontanarrosa se sorprendió años atrás cuando el productor José Luis Massa le soltó la idea de arrancar al gángster del papel y elevarlo al cine con sus miserias más turbulentas. "Boogie me despreciaría por ser sudamericano de un país periférico", ironizaba el rosarino y, mientras le hacía frente como león a su enfermedad, se dispuso a colaborar para darle vida a la resentida y despiadada criatura.
Así, antes de emprender la partida en julio de 2007, Fontanarrosa llegó a ver el primero de los nueve guiones que se escribirían y defendió la fidelidad en el salto de su personaje al cine.
Agudizando el ojo, en el filme cuyo presupuesto ronda los dos millones y medio de dólares reinan aunque escondidos los guiños homenaje: desde "La Eulogia" como extra, al desfile de "toda la mitología fontanarrosesca", indicó Cova, exultante luego de que la película girara con gran repercusión por festivales como el de Zagreb (Croacia) y Annecy (Francia).
En la trama, el fortachón de mandíbula bulldog se muestra como un verdadero exponente del gatillo fácil, un hombre sin límites, racista y machista que dispara sin temblar a todo aquel que se interpone en su camino, disfruta de los litros de sangre que promueve, arrolla perros con su auto, denigra al sexo femenino y se jacta de que "todo lo humano" le es "ajeno".
De movida, se presenta como un muchacho preparado para el combate, ex combatiente en Vietnam que luchó "sumergido en aguas podridas". En esta historia, Sonny Calabria, un capo mafia de la ciudad, es llevado a juicio y necesita "callar" a la testigo principal.
Como no contrata a Boogie para el trabajo sucio, sino al archirrival Jim Blackburn, el rubio secuestrará a la joven para demostrar su superioridad.
Los mentores del proyecto dicen estar bien preparados para el posible aluvión de críticas en referencia a lo descarnado del personaje, que en cine tampoco intentará redimirse, sino que hará alarde de su costado más repulsivo.
En este contexto los realizadores afirmaron que "Boogie jamás se redimiría. Al ser la parodia del extremismo violento, no siente nada por nadie, y de hecho el único lugar en que cree enamorarse es al encontrar un reflejo, una mujer tan brutalmente asesina como él."
Apta sólo para mayores de 13 años, la producción de José Luis Massa y Hugo Eduardo Lauría tiene guión de Marcelo Paez Cubells.