Con la decisión de la Corte, ahora puede sufrir procesos penales durante su mandato. "Sigo adelante", dijo el primer ministro y acusó a jueces de "izquierdistas"
El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, recibió un durísimo golpe a su poder al invalidar la Corte Constitucional italiana el "laudo Alfano" (por el apellido del ministro de Justicia), la ley que le daba una preciosa inmunidad y que sirvió para suspender los procesos penales en su contra.
De los quince jueces del máximo tribunal del ordenamiento jurídico italiano, nueve votaron por la inconstitucionalidad del "laudo Alfano". Los otros seis sufragaron por su vigencia.
La Corte declaró que habían sido violados dos artículos de la Constitución italiana de 1949. En primer lugar el artículo 138 que impone en estos casos que el Parlamento debe dictar una ley constitucional y no una ordinaria. Pero una ley constitucional necesita al menos entre uno y dos años porque las cámaras deben votar dos veces y obtener una mayoría calificada.
En cambio, en julio del año pasado el ministro de Justicia Angelino Alfano, por instrucciones del propio Berlusconi, promovió una ley ordinaria porque el tiempo apremiaba: se acercaba la sentencia penal por el caso Mills.
David Mills era el abogado inglés de Berlusconi, propietario de Fininvest, la empresa madre de su imperio televisivo que comprende las tres grandes redes de la televisión privada. En un proceso penal en Milán, la justicia estableció que Berlusconi había coimeado a Mills con 600 mil dólares, pagados con fondos negros en el exterior, para que el abogado inglés mintiera eximiendolo de toda responsabilidad en otros dos procesos penales.
Mills fue condenado el año pasado a cuatro años y seis meses de cárcel. Berlusconi logró zafar gracias al "laudo Alfano". La justicia de Milán promovió una iniciativa de inconstitucionalidad ante la Corte Constitucional, que falló hoy contra el primer ministro.
La Corte también sentenció que el "laudo Alfano" había violado el artículo 1 de la Constitución que establece la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley.
El anuncio del fallo causó una honda conmoción en Italia y en Europa. "Sigo adelante", declaró Berlusconi a diputados de su partido de las Libertades. Ahora se abren las puertas para que il Cavaliere sea condenado por el caso Mills y otros dos procesos penales.