Si durante estos días alguien pretende conectarse con el Messenger deberá actualizar a la última versión. Ninguna de las anteriores permanecen en vigencia y quien opte por no cambiar, tampoco podrá iniciar una sesión.

El argumento oficial es que el cambio responde a motivos de seguridad, ya que el nuevo mensajero corrige muchas fallas de vulnerabilidad. De acuerdo a Martín Spinetto, gerente de marketing de los servicios online de Microsoft de América Latina "esta versión del software tiene mejoras de seguridad que apuntan a las redes sociales. Es mucho más robusta en el tema de intercambio de fotos en tiempo real, ya que se puede pasar una antivirus antes de que se descargue la imagen. Hubo una primera etapa opcional, en la cual el 50 por ciento de la gente cambió voluntariamente".

Lo que se busca es reducir la circulación masiva de virus y otras amenazas informáticas. Es que si alguien no tiene la última versión del programa puede contagiar de virus a los que si la tienen.

Pero el Windows Live Messenger no está completamente exento de problemas. No son pocos los usuarios que registran a un contacto como ausente cuando en realidad está conectado, o al enviar un texto se le advierte mediante un cartel que es posible que el otro no haya recibido el mensaje, cuando la respuesta que llega indica todo lo contrario.

Para cualquier inconveniente complementario, se puede ingresar a http://messenger-supportes.spaces.live.com donde se ofrecen diferentes niveles de ayuda para casos puntuales.

El mensajero de Microsoft es uno de los más populares en el país, donde cuenta con un capital de 12 millones de usuarios.