"Ya no aguantaba más".

La confesión de ese chico de 20 años que acababa de llegar a la gloria pareció una manera de desahogarse después de tanta tensión.

Juan Martín Del Potro les agradeció a todos los suyos, en un festejo en el que no faltaron las lágrimas.

"Yo tenía dos sueños en mi vida: ganar este torneo y ser como vos". Fue otra de las frases para el recuerdo, con la mirada fija en un Roger Federer que seguramente no podía creer haber perdido. Ese coloso que parecía indestructible, sobre todo en Flushing Meadows.

Entre lágrimas, Juan Martín dio primero su mensaje en inglés. "Esto estará en mi mente toda mi vida. No sé cómo explicar esto", explicó muy shockeado. Y después se acordó de los suyos: "Quiero agradecer a mi equipo porque sin ellos esto es muy difícil. A todos los argentinos que están acá, a mis abuelos, a mis amigos, a toda mi familia y los que me apoyaron todo el tiempo. Esto es para ustedes".