El equipo Gareca sigue con el puntaje ideal (9 unidades). En contraste, Gimnasia, que llegaba de una goleada en el clásico con Estudiantes, sumó la tercera derrota consecutiva en el campeonato y comparte sin puntos el último escalón junto a Chacarita Juniors y Huracán.

Con este resultado, Vélez se vengó del único rival que lo venció, en esa misma cancha, durante la campaña de campeón en el pasado torneo Clausura. En un campo rápido por la lluvia, Vélez pisó con mayor seguridad en el primer tiempo y estableció una leve superioridad en el desarrollo del juego a pesar de las ausencias (tres de sus defensores titulares y el goleador uruguayo Rodrigo López).

Maximiliano Moralez, ágil para el dominio y traslado de la pelota, y Jonathan Cristaldo, veloz para fabricarse espacios una zaga rival pesada, se destacaron en el comienzo de un partido intenso y cambiante.

La visita, de mejor trabajo colectivo, alarmó a un seguro Gastón Sessa con tiros desde afuera del área (Juan Manuel Martínez a los 26 y Rolando Zárate a los 35) y una entrada de Moralez que demandó una buena intervención del arquero (23m.). A las bajas conocidas, Vélez sumó la de Gastón Díaz -único defensor habitualmente titular- por lesión en el trascurso de la primera parte, por lo que Fabián Cubero pasó al lateral derecho, Martínez se retrasó a la línea media y Zárate ocupó un lugar en el ataque.

El campeón supo también asimilar ese movimiento de piezas y en el arranque del complemento tuvo la ocasión más clara cuando Sessa le tapó un remate al "Roly" dentro del área, después de una hábil maniobra personal de Cristaldo. Gimnasia, con un ligero progreso respecto a las dos primeras fechas, respondió de igual a igual ante cada ataque del rival pero sin demasiado peso ofensivo para inquietar a Germán Montoya.

Los intentos de Mariano Messera en la gestación de juego, la amenaza del "gigante" Denis Stracqualursi y la presencia de José Vizcarra no alcanzaban para torcer al buen equipo de Gareca. Recién con el ingreso del escurridizo Juan Cuevas, más apto para el estado de la cancha, Gimnasia ganó en profundidad pero sin que se tradujera en el marcador.

Pasada la media hora del complemento, ambos equipos se conformaban con el resultado pero Vélez -siempre más peligroso- sorprendió con una victoria agónica, como la conseguida en la primera fecha ante Colón en Santa Fe. Moralez recogió una pelota en tres cuartos de cancha con un rival extenuado por el esfuerzo físico, apuntó al arco de Sessa y colocó un derechazo junto a un palo para festejar una victoria que lo proyectó al liderazgo absoluto del Apertura.