Fue cuando un periodista del multimedio le preguntó sobre su enriquecimiento y la jubilación de privilegio. “No le tengo miedo ni a Magnetto ni a la señora de Noble”, dijo
La visita de Néstor Kirchner a La Plata se transformó en un nuevo capítulo de la guerra cuerpo a cuerpo entre el Gobierno nacional y Clarín.
En un estrecho salón del tradicional Centro Vasco de la capital de la provincia, Kirchner, rodeado de dirigentes justicialistas, respondía cordialmente las respuestas que le hacían los periodistas cuando llegó el turno del enviado de Clarín y la conferencia de prensa se convirtió en un ataque directo del ex presidente hacia el matutino porteño.
El periodista Leonardo Míndez rompió con el rumbo que conservaban las preguntas, más orientadas a cuestiones de la política platense, la situación de la provincia y de la Ley de Medios, y le preguntó al marido de la Jefa de Estado cómo podía justificar un “incremento patrimonial del 570 por ciento” desde su asunción en la presidencia en 2003.
Kirchner abandonó instantáneamente su tono cortés e interrumpió la pregunta de Míndez diciéndole “mirá, yo no sé si te mando Clarín o (Héctor) Magnetto”, a lo que el periodista retrucó “no me mandó nadie”, y el ex presidente, rápido, volvió a interrumpir: “Sé que te mandaron, pero te lo digo con todo cariño”.
Luego de que Kirchner le respondiera que se somete “a la investigación de la Justicia” para lo que sea, dijo: “No me someto al poder monopólico de Clarín”.
El cronista le preguntó, además, si pensaba donar su pensión de 24 mil pesos.
“Es problema mío”, respondió el ex titular del PJ nacional y recibió el aplauso de algunos militantes que habían sido convocados en la conferencia.
Kirchner continuó en la misma línea y visiblemente eufórico, dijo “yo no le tengo miedo a nadie, que vayan saliendo”, mientras Míndez meneaba la cabeza y el resto de la sala mantenía un mutismo de ultratumba.
“No le tengo miedo ni a Magnetto ni a la señora de Noble”, asestó en referencia al CEO y a la dueña de Clarín, respectivamente.
Después de ese tenso episodio, el diputado electo, cada vez más nervioso, no paró de hacer alusiones al “monopolio” en referencia a Clarín, cualquiera fuera la pregunta del resto de los colegas.
Es más, cuando en un momento de la conferencia el micrófono con el que hablaba dejó de funcionar, el ex presidente bromeó: “No será el monopolio...”.
Incluso repitió “¿Qué te pasa, Clarín?”, una frase que él mismo hizo célebre el pasado 9 de marzo en un acto de campaña en Tres de Febrero.