En un hecho confuso, que en principio tiene características vergonzozas, el ciclista, medallista de oro en Beijing 2008, Walter Pérez, fue arrestado de forma violenta por la Gendarmería por entrenar en la autopista del Oeste a la altura del puente Alvarez, en el partido de Moreno.

Pérez sacó la bicicleta como casi todos los días para emprender una nueva jornada de entrenamiento sin imaginar lo que le iba a pasar.

Es que cuando transitaba por el puente Álvarez junto a un grupo de 100 ciclistas que participaban de la práctica, fue detenido por la Gendarmería que, de forma absurdamente violenta, maltrató al deportista.

El ciclista, compañero de Juan Curuchet en Beijing 2008, fue obligado a bajarse de la bicicleta, lo amenazaron con palos de madera (no con los bastones clásicos que provee la fuerza), lo maltrataron física y psicológicamente, y lo esposaron, según denunció.

"Todo lo que ganó y consiguió en el deporte lo hizo entrenando en esta autopista, desde que era chico", dijo Manuel, su compañero de entrenamiento en exclusiva a C5N.

Cuando fue consultado sobre si fue la primera vez que ocurre un hecho similar, el amigo de Pérez comentó: "Desde que la autopista se privatizó no nos dejan entrenar más acá y la gendarmería apoya a la empresa con estas actitudes. Muchas veces hemos salido de buena manera cuando nos pidieron, pero esta vez nos maltrataron".

En este marco, el Presidente electo del Comité Olímpico Argentino, Gerardo Werthein, concurrió rápidamente a la dependencia donde está arrestado el deportista orgullo nacional para rescatarlo de este mal momento.

"Se lo llevaron cómo a un reo, estoy indignado", dijo Werthein en declaraciones a C5N.

El dirigente no ocultó su enfado por la situación que le tocó vivir al ciclista. "Pude hablar con él y me dijo que lo 'golpearon, maltrataron, estoy esposado y no se por qué'", sostuvo.