La escultural modelo se separó de su novio. Dice que ya no “la escuchaba como antes”. Hacer cola muchachos, que la morocha argentina está disponible
Ya lo decía el poeta: “el amor es eterno, mientras dura”. Y, toda esa historia de amor que la modelo Karina Jelinek había proclamado a los “cuatro vientos”, hoy llegó a su fin.
Así parece revelarlo el portal PrimiciasYa y según pudo establecer Asteriscos.Tv, la cordobesa, no muy compungida se fue de vacaciones a Ibiza, España, con amigas para “olvidar penas de amor”.
Allí cautivó a los turistas haciendo top less y dejando atrás, aparentemente todo el sufrimiento por una historia pasión, otra más y van, que no llega a buen puerto.
“¿Por qué cuesta tanto ser feliz?”, parece que repitió varias veces a sus amigas Jelinek durante su estadía en Ibiza en la búsqueda de una explicación a su triste derrotero en el amor.
“Ya no me escuchaba como antes. A mi me gusta mucho hablar con mi pareja y hacerle saber mis pensamientos”, dijo la modelo según revelaron fuentes cercanas a la escultural mujer, según estableció este portal.
En el pasado del amor quedaron aquellos comentarios de Jelinek cuando gozaba a pleno de su pareja.
"Mi novio cruzó el (Océano) Atlántico para conquistarme. Me siguió de Miami a Paris. Ahí fue el primer beso y solo consiguió un beso. No tuvimos sexo en París… Está loco de amor como yo por él. Es mi cuarto novio y el 20 de diciembre cumplo dos años.Vamos a ir a cenar con velas y comer pescado".
Por lo visto, la reserva en ese restaurante fue cancelada en las últimas horas y ahora, Jelinek, está nuevamente solita y los halcones piratas sobrevuelan sobre ella.
¡Suerte muchachos!.