El Barcelona quiere dejar en claro que Lionel Messi es la figura de su equipo, y a pesar de haber pagado por el ex delantero del Inter de Milán Zlatan Ibrahimovic una cifra cercana a los 66 millones de euros, el argentino gozará de un aumento de su claúsula de recisión de 100 millones de euros.

El director deportivo de la institución catalana, Txiki Begiristain, reconoció que subirle la claúsula a Messi es "el precio de tener al mejor jugador del mundo en el equipo" y por eso deben arreglarle el contrato cada año que pasa.

La firma de la "actualización" contractual del jugador rosarino se extendería hasta después del día 12 de agosto, cuando finalice el encuentro que la selección argentina enfrente a Rusia, en al ciudad de Moscú.

De esta manera, Messi será quien tenga la cláusula de rescisión más alta, que era de 150 millones de euros.

Finalmente el entrenador "culé" reconoció que desea que "Leo sea feliz". Esa felicidad también pasaría porque el delantero argentino tenga la compañía de un amigo, el mediocampista Javier Mascherano.