El flamante ministro de Economía arrancó con el pie cambiado. Organismos de derechos humanos dicen que su mano derecha, Juan Guiñazú, es hijo de un represor
Una inexplicable demora en anunciar a su grupo de colaboradores comenzó a hacer circular distintas versiones sobre el ministro de Economía, Amado Boudou.
Todo se complicó al circular una inquietante versión, sobre la cual aún no hubo definiciones en esferas oficiales.
La mano derecha de Boudou se llama Juan Guiñazú y se trata de un abogado marplatense que lo acompañó en su gestión en la Anses. Boudou evaluaba ubicarlo en la Jefatura de Gabinete de Economía o en la Secretaría de Política Económica.
Según La Política Online, Guiñazú está mas cerca de abandonar el gobierno –y de mala manera-, que de ser elevado a algún cargo estratégico en el Ministerio de Economía.
Es que en la Casa Rosada llegó un dato inquietante: el padre de la mano derecha de Boudou sería el ex capitán de fragata Rafael Guiñazú, subjefe de la Base Naval de Mar del Plata en 1977 y jefe de la agrupación de Buzos Tácticos de 1976 a 1978, acusado por organismos de derechos humanos por 430 hechos de violaciones y torturas física y psicológicas, durante la dictadura.
La causa que llevó a los tres capitanes tras las rejas se inició a partir de una presentación judicial de Abuelas y Madres de Plaza de Mayo, Familiares de Desaparecidos y Ex Detenidos de Mar del Plata, que fue acompañada por la Secretaría de Derechos Humanos provincial.
Guiñazú, por tener más de 70 años, logró evitar un inminente traslado a la cárcel de los represores de Marcos Paz, y actualmente se encuentra cumpliendo arresto domiciliario en su casa de Mar del Plata.
Si bien, al cierre de esta información La Política Online no había aún obtenido una confirmación absoluta sobre la relación de este represor con la mano derecha del flamante ministro de Economía –también oriundo de Mar del Plata, ciudad a la que aspira gobernar en el futuro-, lo cierto es que dos fuentes del kirchnerismo confirmaron que la furia del matrimonio Kirchner contra Boudou por este tema es absoluta.
“Nunca les dijo nada, y los más grave es que este Guiñazú ya venía trabajando en la Anses”, afirmó a La Política Online una fuente kirchnerista.
Si bien es cuestionable que se pueda descalificar a una persona por lo que hizo su padre, el problema en este caso no sería tan sencillo. Es que Juan Guiñazú, según afirmaron las fuentes consultadas, “parece que habría desempeñado en el pasado un cargo en Mar del Plata, y cuando le solicitaron una entrevista organizaciones de derechos humanos, se había negado a recibirlos. Eso es lo más grave, y ya no tiene que ver con el padre”, agregó la fuente.
Tan grande es el enojo de los Kirchner con su hasta hace poco Golden boy, que ahora habrían comenzado a bocharle todos los nombres que propone para el Ministerio de Economía. Esa sería la explicación de la inusitada demora en anunciar su equipo –formalmente anunciada para ayer y luego para hoy, sin que finalmente se produjera-, que viene señalando este medio.
También es posible que este malestar sea la explicación de la notable ausencia de Boudou en la reciente cena que encabezó la Presidenta con la CGT y la UIA, y que pese a ser una reunión netamente económica, no lo contó entre los comensales.
“Bastante lastre era para un gobierno del perfil de los Kirchner poner un ministro de Economía que venía del ultraliberalismo del CEMA, pero que encima aparezca en el medio la cuestión de la represión de la Dictadura, con la importancia que le da esta gestión al tema de los Derechos Humanos, ya parece demasiado”, agregó la fuente consultada.