Por Roberto Aguirre Blanco

La mística copera corre por la sangre de los "pincharratas",y con ese fuego sagrado lograron el pasaje a la final de la Copa Libertadores de América al derrotar en Montevideo a Nacional de Uruguay por 2 a 1.

Dos golazos del delantero Mauro Boselli, al inicio del segundo tiempo y en el tiempo de descuento del partido, fueron suficientes para que el equipo de La Plata alcanzará la gloria de volver a jugar una final de la Copa Libertadores después de 38 años.

Con una actitud ganadora y con un hecho que no hay que menospreciar, la ausencia de su máxima figura Juan Sebastián Verón--lesionado en el partido de ida--, Estudiantes fue al mítico Centenario buscando la gloria y se trajo también la hazaña.

Sin público que lo alentará, por una decisión previa de ambos clubes de no tener hinchada visitante, el equipo que dirige con inteligencia Alejandro Sabella no fue a buscar el empate que podría clasificarlo sino que apostó al triunfo.

Ese protagonismo fue la clave para el éxito, y de la mano del delantero Boselli alcanzó a los 7 minutos del segundo tiempo el primer gol del partido que obligaba a Nacional convertir tres tantos para acceder a la final.

Los uruguayos nunca encontraron el camino para acceder a la valla de Estudiantes, por mérito del buen trabajo del arquero Mariano Andujar y las repeticiones en el ataque de los "charrúas".

Sin embargo, al promediar la etapa final, Medina descontó tras un falla del defensor Rolando Schiavi y logró vencer la valla del "pincha" en la Copa Libertadores después de más de 800 minutos de mantenerlo invicto.

Luego, cuando Nacional buscaba desesperadamente descontar y acceder a una chance de clasificar, el equipo visitante tuvo la certeza de aprovechar los espacios que le debajan los locales, pudo poner el 2 a 1, tras una excelente jugada de Salgueiro y definición de Boselli.

Estudiantes hace historia y llega a la final del torneo más importante del continente y lo hace desde la humildad:

No hay que olvidar que accedió al torneo luego de superar, en febrero pasado el repechaje, y caminó con voluntad y sueños hasta esta final.

El rival se definirá este jueves cuando se midan en Brasil, Cruzeiro y Gremio, en un partido que favorece hasta ahora a los de Porto Alegre que ganaron 2 a 1 en su casa.

Así, estos jugadores de Estudiantes tienen la chance de entrar a la historia grande del club y del fútbol argentino como hace 40 años lo hicieron Carlos Bilardo, Juan Ramón Verón, Marcos Conigliaro, Carlos Pachamé, Alberto Poletti, Raúl Madero, entre otros bajo la conducción del inolvidable Osvaldo Zubeldía.

Ese plantel ganó en trea años consecutivos (1968/1969 y 1970) la Copa Libertadores y perdió a la vez la final de 1971 ante Nacional de Uruguay.

Por su parte, su entrenador, esa grata sorpresa que es Alejandro Sabella buscará su revancha, ya que en 1983 llegó hasta las semifinales en el plantel que integraban entre otros, Marcelo Trobbiani, Miguel Angel Russo, Guillermo Trama y José Ponce, entre otros.

¡Vamos "Pincha" que la gloria está al alcance de la mano!.