Seis años pasaron donde el kichnerismo tuvo la hegemonía total en el Congreso nacional. Este 28 de junio, la era K terminaría su ciclo de oro ya que perdería el quórum propio en las dos cámaras.

Según las estimaciones de Artemio López, de la consultoras Equis, de Rosendo Fraga, de Nueva Mayoría, el oficialismo resignaría entre 13 y 17 diputados y entre tres o cuatro senadores.

En la Cámara baja, el Frente para la Victoria-PJ y sus aliados ostentan un bloque de 141 legisladores de 257 totales. En la Cámara alta poseen 38 de 72. Están en juego 127 diputados y 24 senadores.

Para llegar al quórum propio en Diputados se necesitan 129 presentes, mientras que en el Senado son 37. Con estos pronósticos, el kirchnerismo no llegaría a tener la mayoría parlamentaria por uno o cinco diputados y por dos o tres senadores.