Las chicas, entre ellas la cantante Lola Ponce, habrían participado de las "reuniones" del premier italiano Silvio Berlusconi. Por estos días, el escándalo que se desató por las fotografías de las fiestas llegó a la justicia italiana.

Las fiestas del premier italiano Silvio Berlusconi ya es una cuestión de Estado. El escándalo por las fiestas organizadas en el Palazzo Grazioli con hermosas jovenes llegó a la justicia italiana pues la fiscalía de Bari inició una investigación por las declaraciones de Patrizia D'Addario, quien aseguró haber cobrado 2000 euros para ir a la fiesta del "Cavaliere".

Sin embargo, un conocido periodista, amigo de Berlusconi, Carlo Rosella, defendió al premier italiano asegurando que las fiestas son reuniones inocentes con gente amiga.

El periodista dijo que en una de esas reuniones asistió la cantante argentina Lola Ponce, quien vive hace muchos años en Italia, donde alcanzó la fama luego de ganar el festival de San Remo el año pasado. Y, "una música argentina perseguida por la dictadura", aunque no trascendió su nombre. Consultada por el diario La Nación, Ponce, nacida en la localidad santafesina de Capitán Bermúdez, no admitió ni negó haber estado en la mansión de Berlusconi, según publicó La Nación.

No obstante, Lola no sería la única argentina que pasó por la mansión de Berlusconi pues apareció el nombre de Belén Rodriguez, modelo y participante del reality show "La isla de los famosos" en Italia y fue conductora de un programa en uno de los canales del Berlusconi.