Advirtió que Kirchner busca quedarse "14 años" en el poder y que eso provocaría un "deterioro institucional muy grande". El ex ministro sube la apuesta política
El ex ministro de Economía Roberto Lavagna denunció que con la idea que expresó el presidente Néstor Kirchner para reformar la Constitución, el jefe de Estado busca quedarse "14 años" seguidos en el poder.
Advirtió sobre "un deterioro institucional muy grande".
La denuncia de Lavagna coincide con versiones sobre dichos de Kirchner respecto de que necesita 15 años para cambiar la Argentina, que fueron recogidas por Asteriscos.Tv en medio políticos y empresariales.
"Dicen que quieren reforma de la Constitución para limitar la reelección. No, es para lograr 14 años de reelección, para agregar a los 4 y 4 que la actual prevé, una nueva Constitución a partir de la cual se vuelve a empezar a contar y se agregan 6 años: son 4 más 4 más 6. Son 14 años", enfatizó Lavagna.
El ex ministro se pronunció de esa forma luego de las versiones sobre un impulso oficial a una posible reforma constitucional para ampliar el mandato presidencial de 4 a 6 años y eliminar la reelección.
Si bien en un primer momento el Gobierno admitió la posibilidad, el lunes último el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, sostuvo que "mientras Néstor Kirchner sea Presidente no está previsto impulsar ninguna reforma constitucional".
El ministro coordinador aseguró, a través de un comunicado oficial, que en una "charla informal" que mantuvo con un grupo de periodistas en la ciudad de Nueva York, el presidente Kirchner "brindó su opinión personal de volver a instaurar un mandato presidencial de 5 ó 6 años antes que el actual sistema de 4 años de mandato con posibilidad de reelección".
Lavagna destacó que "afortunadamente en este caso la sociedad reaccionó" y que de acuerdo con los resultados de encuestas la idea de una nueva reforma constitucional sería rechazada por la opinión pública.
En forma paralela, el ex ministro acusó al gobierno de "dormirse sobre los laureles" y "desperdiciar la herencia de 2005", año en que dejó el cargo al frente del Palacio de Hacienda.
Lavagna, quien se postularía a la Presidencial el año próximo, señaló que el Gobierno nacional realiza "gestos, en otros casos gesticulaciones un poco crispadas, que tienen que ver poco con lo que es la gestión".
Y repartió críticas a la administración de Kirchner por la "crisis energética", el manejo de la inflación y los anuncios de nuevos créditos hipotecarios para inquilinos.
Lavagna apuntó, sin mencionarlos, contra la ministra de Economía, Felisa Miceli, y el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido.
A Miceli le recriminó que "este año se va a perder alrededor de un punto del superávit fiscal que dejamos el año pasado".
Y señaló que el proyecto de Presupuesto que presentó en el Congreso prevé "un aumento del gasto" público, al tiempo que señaló: "prestemos mucha atención a esto sobre todo en un año electoral".
Con De Vido, Lavagna fue aún más duro. Señaló que su cartera "ha ido acumulando fondos, temas, pasa mucho tiempo en discutir con otros Ministerios para apropiarse de temas que están en otro lado y después no hacen absolutamente nada, simplemente ocupar espacios".
También apuntó en forma tácita contra los gobernadores de Buenos Aires, Felipe Solá, y de Mendoza, Julio Cobos, porque sus provincias prevén volver a endeudarse en el exterior.
"Es una estrategia muy parecida a la de ganar tiempo, empujar para adelante, como se hizo en la década del 90", evaluó.
En tanto, Lavagna evitó adelantar si finalmente anunciará su candidatura presidencial y en ese caso cuándo lo hará.
"Hay tiempo para las cuestiones políticas. Yo no voy a ser candidato hasta que no esté en claro" cómo se conformará una coalición en torno a su candidatura, explicó.
Para el ex ministro "hay que ver con quién, para qué, con qué ideas y con qué programa" se postula.