"No es bueno que el hombre esté solo"
La frase la dijo el sacerdote Alberto Cutié, quien fue fotografiado besando y acariciando a una mujer en una playa de Miami
7 de mayo de 2009
Apelando a una frase bíblica, se defendió el famoso sacerdote católico de Miami Alberto Cutié, quien fue separado de su parroquia luego de que una revista publicara fotos en las que se lo veía haciéndose arrumacos con una mujer en una playa.
A pesar de que las imágenes generaron un gran revuelo, la conducta de Cutié en ellas es coherente con las críticas al celibato dentro de la Iglesia que sostiene desde hace tiempo.
"Dice la Sagrada Escritura: 'No es bueno que el hombre esté solo' y eso yo lo he vivido en carne propia. Lo he visto en muchos hermanos y en mí mismo", se excusó el sacerdote en una carta dirigida a sus "amigos" de la comunidad de Miami.
El religioso, de 40 años, no negó nada, por el contrario, admitió las escapadas amorosas con la mujer de la foto, de quien se negó a revelar la identidad. "Sería inapropiado –identificarla-. Para esa persona es mejor no hablar de eso, ha sido suficiente ya, ha sido mucho para mí y para mi familia", sostuvo.
Por el escándalo que desencadenaron las imágenes, en la que se lo ve besando y acariciando a una mujer, el arzobispado de Miami removió temporalmente a Cutié de la parroquia San Francisco de Sales.
No obstante, el cura enamorado recibió esta mañana un nutrido apoyo de sus fieles, que se congregaron frente al templo para solidarizarse con él y pedir su retorno a la iglesia.