El ministro de Planificación, Julio de Vido, compartió un desayuno con medio centenar de directivos de importantes compañías en Nueva York, con el objetivo de convencer a los empresarios, sobre todo estadounidenses, de las bondades de invertir en Argentina y, particularmente, en el sector energético.

El principal tema del encuentro, al que asistieron, entre otros, representantes de Occidental Oil and Gas Corporation y Duke Energy Argentina, fue el de las inversiones energéticas, aunque, contra lo que esperaban algunos empresarios del sector, el ministro ya aclaró que no se anunciarán aumentos de tarifas.

Los empresarios estadounidenses hicieron varias preguntas, en general destinadas a conocer la verdadera situación de disponibilidad de energía, la política en materia de precios, los planes para transportes, la relación entre el Estado central y las provincias en materia de infraestructura y las posibilidades de la explotación petrolera off-shore.

Según había anticipado el propio De Vido, el objetivo del desayuno era informar y explicar la nueva normativa que hay en la Argentina en relación al desarrollo, particularmente en energía.

Trascendió que Occidental estaría dispuesta a hacer una inversión de 1.000 millones de dólares en los próximos 5 años y ayer el grupo Soros discutió con De Vido la posibilidad de una inversión por 500 millones de dólares para el desarrollo de energías alternativas como el etanol.

El gancho que utilizó el gobierno para seducir a empresarios fue la nueva ley que se votó la semana pasada, que exime de impuestos a las empresas del sector de hidrocarburos y que tanto urgía a las autoridades sancionar.

En el marco de la visita presidencial a Nueva York y vinculado con el tema energético, ayer el presidente Néstor Kirchner y su par del Paraguay, Nicanor Duarte Frutos, acordaron cambiar la deuda paraguaya con el estado Argentino por el suministro de energía de Yacyretá.