Todo indica que el Gobierno ya reunió los 37 votos para aprobar el cambio del calendario. Los detalles
El oficialismo tendría asegurado los votos para sancionar hoy en el Senado el adelantamiento de las elecciones nacionales legislativas de medio término al 28 de junio y permitirle así a la Casa Rosada plebiscitar su gestión antes de que los efectos de la crisis financiera internacional puedan golpear con toda su fuerza en el país.
Si alguna duda quedaba en los despachos oficiales sobre la sanción de la reforma al Código Electoral que impulsa el Poder Ejecutivo, ésta fue despejada con el sorpresivo anuncio de los dos representantes del ARI de Tierra del Fuego, José Martínez y María Rosa Díaz, de que apoyarán en la sesión de hoy, convocada para las 10, el proyecto aprobado el miércoles de la semana pasada por la Cámara de Diputados, analiza el diario La Nación en su edición de este jueves.
La noticia abrió el juego a las especulaciones sobre la relación de la gobernadora de Tierra del Fuego, Fabiana Ríos (ARI), con el Gobierno y con la Coalición Cívica de Elisa Carrió (de lo que se informa por separado) y desplomó las acciones de los senadores oficialistas, que hasta ayer coqueteaban con un posible rechazo a la iniciativa para hacer valer su voto ante la necesidad del Poder Ejecutivo de alcanzar su objetivo.
Por tratarse de una reforma al régimen electoral, la Constitución Nacional exige una mayoría absoluta de 37 votos afirmativos en el Senado (mitad más uno del total de sus 72 miembros). Según la norma vigente las elecciones deberían realizarse el cuarto domingo de octubre. La iniciativa que discutirá hoy la Cámara alta dispone una excepción "por única vez" de esa regla.
Ayer, las cuentas kirchneristas variaban entre 40 y 42 voluntades. "Vamos a tener un número superior a 40", arriesgó el santacruceño Nicolás Fernández en un aparte que mantuvo con la prensa durante la reunión de bloque oficialista, de la que participaron unos 30 legisladores.
Además de los fueguinos, el Gobierno contará con el apoyo de Horacio Lores, del Movimiento Popular Neuquino. El resto de los votos los aportará el kirchnerismo, fortalecido por el regreso de varios díscolos al redil, como la riojana Teresita Quintela, que ayer se preocupó por aclarar ante LA NACION que su voto no guarda relación con los fondos prometidos por Néstor Kirchner a su hermano Ricardo, intendente de La Rioja. "El Gitano [como se conoce al jefe comunal en su provincia] todavía no recibió un peso", informó una colaboradora de la legisladora.
La oposición, en tanto, reuniría algo más de 25 votos. Aportarán al rechazo la UCR, la Coalición Cívica, el socialismo, partidos provinciales y la diáspora de peronistas disidentes.
Una vez sancionada la ley al Gobierno lo correrán los tiempos: la convocatoria a elecciones debe realizarse con 90 días de antelación. Si se fija la nueva fecha en el 28 de junio, ese paso deberá ser resuelto antes del sábado próximo.
En un anexo, el proyecto establece el nuevo cronograma, que comenzará el 28 de abril con el fin del plazo para la constitución de alianzas. La campaña electoral comenzará el 29 de abril próximo, levantándose la veda en los medios un mes después.
En estas elecciones se elegirán 127 diputados nacionales y 24 senadores. El resultado será fundamental para la suerte del proyecto político del matrimonio Kirchner.