Febrero arrasó con el calor. Las temperaturas promedio de este mes en la ciudad de Buenos Aires se instalaron dos grados por encima de los valores promedios registrados durante los últimos 30 años. Y también se hicieron sentir desde el norte hacia el sur del país, con 38 grados en Viedma, en la provincia de Río Negro. Aunque ayer la ciudad fue un horno, hoy el termómetro empezaría a ceder.

El fenómeno de la ola de calor en la Argentina, con temperaturas que rondan los 40 grados, se debe a que, desde el comienzo del verano, hubo un exceso de lluvias en el este de Brasil. Esto hizo que faltaran lluvias en la Pampa húmeda y en el Litoral, produciendo la mayor sequía de los últimos cincuenta años. Además, la temperatura promedio de este més está en los 25,5 grados, mientras que el promedio en los últimos 30 años fue de 23,5 grados, lo que ubica a este febrero como el más caluroso de las últimas décadas, analizó el diario Clarín en su edición de este viernes.

Esta semana el viento Norte sopló cálido y muy seco sobre el territorio argentino y produjo el calor agobiante de ayer y de gran parte de los días de febrero, según explicó a Clarín el meteorólogo Matías Bertolotti, que es director de E-Met, una empresa creada en el ámbito de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires.

En la ciudad de Buenos Aires y el Conurbano, el registro de las 4 de la tarde arrojó la temperatura máxima de 35,1 grados, con una humedad del 51%. Esto hizo que la sensación térmica llegara a 40,9 grados. Esas cifras fueron las más altas del día. Aunque el aire porteño parecía invivible, no se superó un registro histórico. En 1944, se dio la temperatura más alta de febrero, con 38,7 grados.

En el resto del país, la sensación térmica afectó a muchos. Pisó fuerte en la ciudad cordobesa de Marcos Juárez (42 grados), Gualeguaychú, Entre Ríos (41,5 grados) y en Curuzú Cuatiá (45 grados). Además hubo marcas térmicas que superaron los 40 grados en Paso de los Libres (Corrientes), Ceres y Reconquista (Santa Fe), Córdoba y Concordia (Entre Ríos). La temperatura máxima más elevada del país fue de 38,2 grados en la ciudad de Ceres (Santa Fe).

En la Costa Atlántica bonaerense, los veraneantes tuvieron un buen día. En Mar del Plata, se registraron ayer 30 grados de temperatura. "En febrero llovió más que en enero", comentó el meteorólogo. "Para los que están de vacaciones es una buena noticia, porque significa que tienen más días con cielo despejado". Sin embargo, para los que dependen de la lluvia para sembrar o cosechar, no será suficiente. "Las lluvias de febrero fueron aisladas y no llegaron a compensar el déficit que se venía arrastrando", señaló.

Ante tanto calor, ayer el Ministerio de Salud de la Nación salió a recordar las medidas de prevención. Las altas temperaturas tiene efectos perjudiciales principalmente en bebés, niños, adultos mayores y enfermos crónicos. Sin medidas adecuadas existe el peligro de padecer deshidratación, agravamiento de una enfermedad crónica o un golpe de calor. Aconsejó suspender toda actividad física si aparece alguno de estos síntomas: calambres, mareos o debilidad. Refrescarse y descansar, beber abundante agua segura, jugos de frutas o bebidas mineralizadas.