California, el estado que comanda el ex actor devenido en gobernante, emitió pagarés a proveedores, municipios y contribuyentes agobiada por la falta de fondos
Corto de efectivo y ante una crisis presupuestaria de dimensiones inéditas, el estado de California comenzó ayer a emitir pagarés para poder hacer frente al pago de u$s 3.500 millones a los contribuyentes, los contratistas, los municipios y las agencias de servicio social.
La decisión fue tomada luego de que el gobernador Arnold Schwarzenegger decidiera demorar el pago de estas deudas mientras negociaba a puertas cerradas con la legislatura del estado una salida a la crisis presupuestaria que afecta al “Golden State” estadounidense, sin lograr llegar a un acuerdo, según publica el diario El Cronista.
Según confirmaron la oficina de Schwarzenegger y el contralor estatal, John Chiang, los pagarés servirán para cumplir con la devolución de impuestos a contribuyentes, pero también corresponden a programas estatales claves, como asistencia financiera del gobierno a familias de escasos recursos, ayuda a organizaciones sin fines de lucro que apoyan a los residentes y pagos de becas estudiantiles, entre otros.
Chinag dijo ayer que tendría que emitir los pagarés porque iniciaba otro mes, febrero, pero advirtió que de retrasarse la aprobación del presupuesto su oficina tendría que seguir emitiendo los papeles también en marzo o posiblemente en abril.
California, el mayor estado en términos de población y con un tamaño de su economía similar a todo el PIB de Francia, enfrenta un déficit presupuestario que alcanza los u$s 42.700 millones para los próximos 17 meses y continúa en aumento. Schwarzenegger ha propuesto recortes drásticos en el gasto de todos los departamentos, así como fuertes aumentos de los impuestos, para cerrar el mayor déficit de su historia.
Aunque algunos legisladores han mencionado un potencial acuerdo, el contralor del estado alertó que algunos de esos acuerdos pueden enfrentar limitaciones legales, como una reducción propuesta al presupuesto educativo por unos u$s 4.000 millones.
California permanece en emergencia fiscal y, aunque hasta ahora ha podido cubrir el pago de los intereses y vencimientos de deuda, el fantasma del default sobrevuela sigilosamente.
Un corte judicial determinó que, en estado de emergencia, el gobernador Schwarzenegger tiene autoridad para ordenar vacaciones obligatorias a cerca de 250.000 empleados públicos. Estos serían aplicados el primer y tercer viernes de cada mes a partir del próximo 6 de febrero, hasta nueva orden.
Aunque esa medida podría ahorrar al estado unos u$s 1.400 millones anuales, según cálculos del propio gobernador, los costos políticos serían altos y están lejos de solucionar la escasez de liquidez y el déficit. Los dos días de descanso obligatorio sin goce de sueldo se traducen básicamente en un 10% de la jornada mensual de labores de los empleados públicos.
El Plan Obama en el Senado
Los preocupantes datos de California se conocieron al tiempo que se informó que la actividad industrial se contrajo nuevamente en Estados Unidos y el gasto del consumidor registró un inusitado sexto descenso consecutivo en diciembre.
En este marco, el presidente Barack Obama convocó a líderes demócratas a un encuentro ayer para impulsar su mensaje de urgencia para la aprobación del paquete de estímulo económico.
La Cámara Alta comenzó esta semana a debatir el proyecto que ya logró media sanción en la Cámara de Representantes, pero entre advertencias del Partido Republicano de que es necesario introducirle cambios profundos para que reciba el “ok”. Obama se ha fijado la meta de que llegue al Despacho Oval para su firma antes del 16 de febrero.