El caso Bergara puede marcar un antes y un después en la relación del gobernador Daniel Scioli con la Policía bonaerense.

El gobernador reiteró sus dudas sobre algunas características del secuestro del empresario Leonardo Bergara, quien fue liberado el sábado tras el pago de un rescate.

Scioli no descartó que el hecho pueda tratarse de un mensaje. "Si alguno pensó que si me mandaba un mensaje iba a frenar los cambios, al contrario; voy a acelerar los cambios", manifestó.

El mandatario provincial también ratificó la existencia de características "raras" en el hecho, sobre todo por la participación de los policías en actividad y otros exonerados.

Además, reiteró su "compromiso" para "ir a fondo" con las investigaciones, "ante la innumerable cantidad de versiones que se echan a rodar". "Quiero la verdad", aseguró.

Al ser consultado sobre la posibilidad de que existan cambios en el área de Seguridad de la provincia ante el grave caso Bergara, Scioli fue directo: "Acá pasó algo y algo va a pasar", aunque evitó dar precisiones sobre cómo serían los eventuales cambios en la Policía.

"Luché y trabajé mucho para tener esta responsabilidad. Ante las dificultades, no van a ver que dude, ni arrugue. Voy a hacer todo lo que sé que tengo que hacer, con fuerza y coraje, para seguir adelante en la lucha contra este tipo de organizaciones", manifestó.

Ante la posibilidad de que el secuestro fuera un mensaje, el gobernador afirmó: "Estoy dispuesto a todo. Desde el Estado de derecho con la fuerza de la ley, voy a avanzar en este cambio".

Confirmó que se reunirá esta tarde con el ministro de Seguridad, Carlos Stornelli, para analizar la situación, tras la liberación de Bergara y no descartó que los cambios puedan llegar a alcanzar a las autoridades de la fuerza de seguridad.

"Quiero ser muy cuidadoso. Voy a hablar con el ministro como lo hago cuando hay dificultades en cualquier área del Gobierno. Primero voy a hablar de las acciones a seguir y lo vamos a hacer con mucha responsabilidad, como cada vez ante una situación de Gobierno difícil. No será impulsada por ninguna presión", agregó.