Fue una promesa del presidente de Estados Unidos durante la campaña electoral. Sería el primer paso para luego intentar cerrar la prisión ubicada en Cuba
Como una de las primeras medidas tras asumir como nuevo presidente de los Estados Unidos, Barack Obama ordenó a la fiscalía general de su país suspender durante cuatro meses los juicios a las personas detenidas en la prisión de la base militar de Guantánamo, Cuba.
La solicitud formal, que es válida para los próximos 120 días, fue presentada anoche a los jueces militares que llevan los casos de Guantánamo, en cumplimiento de una orden de Obama.
Durante su campaña, el flamante presidente señaló que en caso de ganar cerraría Guantánamo, donde actualmente hay 245 sospechosos de terrorismo, muchos de ellos con ya siete años sin acusación ni juicio.
Hasta ahora estaba previsto que sólo 20 prisioneros fueran juzgados por comisiones militares, que son tribunales especiales creados específicamente por el gobierno norteamericano para enjuiciar a los detenidos en Guantánamo.
Entre estos 20 presos se encuentra el supuesto autor intelectual de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, Jalid Sheikh Mohammed, y otros cuatro cómplices.