Es un tradicional ritual que se repite en cada cambio de mando en la Casa Blanca. El contenido no trascendió, pero allí se mostraría optimista sobre el mandato de su sucesor
Siguiendo una tradición de la Casa Blanca, el presidente saliente de Estados Unidos, George W. Bush, dejó una nota confidencial en la oficina del Salón Oval para su sucesor Barack Obama, deseándole lo mejor al comenzar su histórica presidencia.
Bush escribió la carta ayer y la dejó en el cajón superior del macizo Resolute Desk -el escritorio llamado así porque se hizo con madera de un barco británico del mismo nombre-, dijo su secretaria de prensa, Dana Perino.
"No brindaré ningún detalle pero el tema es similar a lo que ha dicho desde la noche electoral sobre el nuevo y fabuloso capítulo que el presidente electo Obama está por comenzar, y le desea lo mejor", agregó.
En sus últimas horas antes de dejar el gobierno, Bush habló por teléfono con la secretaria de Estado Condoleezza Rice, el consejero de Seguridad Nacional Stephen Hadley, y el ex jefe de gabinete Andy Card, precisó Perino.