El interventor en la Transportadora de Gas del Norte dijo que analizará si hay una buena prestación del servicio. La gestión durará 120 días, "sino me divorcio", aseguró
El interventor en la Transportadora de Gas del Norte (TGN), Roberto Pons, adelantó hoy que desde el Gobierno “haremos una auditoría” sobre el funcionamiento de la empresa, y que se “analizarán los actos cotidianos” que permitan determinar si existe una buena prestación del servicio.
Ayer, el Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) designó a Pons interventor de TGN por 120 días.
El funcionario, quien ya se encuentra en funciones, confirmó hoy que se desempeñará “como coadministrador” y trabajará con el directorio de la empresa.
“Haremos una auditoría de donde surgirá un informe”, con el fin de “recopilar datos e información” sobre el funcionamiento de la empresa, dijo Pons al canal de noticias C5N.
Al ser consultado sobre el default de la compañía -motivo que originó la intervención- dijo que “recién hoy tengo datos contables” y que “sería prematuro emitir una opinión”, aunque recordó que fue uno de los motivos que impulsó la “rapidez con la que actuó el Gobierno”.
“Esto mismo también genera una mayor necesidad de información, y habrá que ver qué elementos de resoluciones cotidianas pueden ser judiciales y afectar el buen funcionamiento del servicio público”, dijo.
Pons sostuvo que desde su lugar de interventor trata de “no prejuzgar”, y dijo que prefiere “masticar dos o tres veces mi información antes de emitir una opinión”.
Cuando le preguntaron si su gestión durará sólo el lapso previsto de 120 días, respondió en tono de gracia: “Espero que sí, sino me divorcio”.
Hasta el momento, el flamante interventor cumplía actividades como jefe del Departamento y Negociaciones Económicas Internacionales de la Unión Industrial Argentina (UIA); es secretario Técnico del Foro Consultivo Económico y Social del Mercosur, e integra el Consejo Asesor Académico de la Fundación Export.Ar, organismo dependiente de la cancillería.