En la remake de El día que la Tierra se detuvo, que se estrena el primero de enero, el actor de Matrix interpreta a Klaatu, el extraterrestre que llega con la advertencia
Keanu Reeves llega en una película que mete miedo y ya genera polémicas.
Reeves interpreta a Klaatu, el extraterrestre que visita la Tierra con un ultimátum para la humanidad, en El día que la Tierra se detuvo, basada en el clásico de 1951 y reinventada como una alegoría ecológica.
"Como hago de un extraterrestre no pude trabajar siguiendo el Método. No pude juntarme con alienígenas -sigue bromeando Reeves-. Pero trabajé de la misma forma en la que suelo hacerlo, preguntándome cuál es mi rol en la película, cuál es mi responsabilidad en la narración, quién soy, qué quiero, por qué estoy ahí. Para mí, interpretar al extraterrestre implicó encontrar la idea conceptual de conciencias separadas contenidas en un recipiente".
Klaatu toma forma humana para poder moverse entre los habitantes de la Tierra y dejarles un importante mensaje: deben dejar de destruir el planeta o serán eliminados.
Con un currículum que incluye películas tan distintas como Alta velocidad, Constantine, Dulce noviembre, Alguien tiene que ceder, Mi mundo privado y La casa del lago, entre muchas otras, el actor decidió volver al terreno de la ciencia ficción para hacerse cargo de un personaje histórico del género.
Todo un desafío al que Reeves no temió siquiera cuando tuvo que aprender a decir unas líneas en mandarín para una de las escenas más extrañas de la película, esa en la que Klaatu se encuentra con otro extraterrestre, que hace años vive en la Tierra, en un McDonald´s de Nueva Jersey.
"Me pareció que esa escena era divertida. No le busqué ningún mensaje, ni significado especial. Fue un desafío hablar en mandarín y pasé bastante tiempo trabajando sobre eso", indicó.
Otro desafío fue crear una relación especial con el personaje de Jennifer Connelly.
"Es un tipo de amor platónico", explica Reeves sobre el vínculo que se forma entre Klaatu y la doctora Benson, especialista en astrobiología.
Esta relación y la que comparten Benson y su hijastro (interpretado por Jaden Smith) resultan clave para que el extraterrestre comprenda que la naturaleza humana tiene un lado positivo, que compensa toda la autodestrucción y la violencia.
Connelly comenta que para componer a su personaje, además de familiarizarse con las astrobiología, leyó textos filosóficos sobre ciencia para poder imaginar lo que podría sentir y pensar una científica que se encuentra cara a cara con un ser de otro planeta y debe demostrarle el valor de la vida humana.
El protagonista de El día que la Tierra se detuvo probablemente sea comparado con Neo, personaje principal de Matrix y el papel más recordado de Reeves.
Además de compartir al actor que los interpreta, ambos personajes son profetas que protagonizan historias de ciencia ficción con un importante contenido alegórico.
Para el actor, una de las ideas más importantes que presenta el mensaje ecológico de la película es que los seres humanos se creen dueños del planeta y se olvidan de que lo comparten con otras especies.
"La película pone en tela de juicio a la humanidad, señalando el impacto que estamos teniendo sobre el planeta", dice Reeves, quien se se confiesa seguidor del género, tanto en literatura como en cine.
"Con los libros de ciencia ficción empecé por cosas más cercanas a la aventura, como Julio Verne. Después me interesé por 1984 , Brave New World y las historias de Phillip K. Dick. En cuanto a las películas, me gustan la serie de La guerra de las galaxias, 2001: Odisea del espacio, Blade Runner, El quinto elemento, El hombre que cayó a la Tierra y Matrix", revela.