La compañía japonesa dijo hoy que los despidos concluirán a finales de marzo de 2010 entre los aproximadamente 160.000 trabajadores de su segmento electrónico. No identificó a los países que resultarían afectados.

Sony ya redujo la producción y disminuyó inventarios, pero los tiempos difíciles exigen medidas más drásticas, explicó la empresa en un comunicado.

La industria electrónica ha sido perjudicada por el desplome de los precios, las fluctuaciones cambiarias, la competencia intensa y un menor gasto de los consumidores en el mundo.

Sony cesará la producción en algunas plantas, incluida una en Francia que elabora cinta y otros recursos de grabación, además de que continuará el traslado de fábricas electrónicas a lugares con menores costos. Los 57 lugares de manufactura que tiene ahora serán disminuidos en casi 10%, indicó.

"Estas iniciativas son en respuesta a los cambios súbitos y rápidos en el ambiente económico mundial", dijo Sony.

El nuevo plan redituará hacia marzo de 2010 al menos 100.000 millones de yenes (1.100 millones de dólares) al año en ahorros por costos, de acuerdo a la empresa.

Sony aplazará además una inversión que había proyectado para impulsar la producción de pantallas de televisores de cristal líquido en Eslovaquia, debido a un descenso significativo en la demanda europea de televisores de pantalla plana.

También abatirá el gasto en los semiconductores y entregará a otras firmas una porción de la producción que había planeado en censores de imagen para teléfonos móviles.