Tres personas murieron el lunes luego que se estrellara un avión militar F/A-18 en una zona residencial en San Diego, sur de California (oeste), confirmaron autoridades.

El balance anterior del accidente daba cuenta de dos muertos y dos desaparecidos, hasta que apareció un tercer cuerpo entre los escombros el lunes en la tarde.

Las tres víctimas se encontraban en una de las dos casas del suburbio de University City destruidas por la caída del avión que se estrelló poco antes del mediodía local (20H00 GMT), según los bomberos.

Otra persona de la casa sigue reportada como desaparecida, pero se sospecha que está muerta.

La muerte de las dos primeras víctimas fue confirmada en una conferencia de prensa ofrecida por las autoridades de la ciudad, servicios de emergencia y militares de San Diego, 200 km al sur de Los Angeles.

"Nuestras oraciones son para las víctimas", dijo a la prensa el alcalde de San Diego Jerry Sanders.

Los cuerpos de las dos personas muertas fueron encontrados calcinados en el lugar de la tragedia.

El portavoz de la FAA, Ian Gregor, dijo en un comunicado que el piloto logró eyectarse del aparato cuando el avión se acercaba a su destino de aterrizaje en la base militar de Miramar, y cayó en terrenos cercanos a una escuela.

Un portavoz de los Marines en Washington indicó que el aparato pertenecía a ese cuerpo del ejército y que el piloto estaba efectuando una misión de entrenamiento.

El piloto aterrizó en un paracaidas que se enredó en un árbol cerca del lugar del accidente y fue hospitalizado aunque según un testigo citado por la televisión local KUSI, Steve Diamond, "él mismo salió del árbol. Estaba bien".

Se desconoce por el momento la causa del accidente pero Diamond, un piloto militar retirado que vio el accidente dijo que el mismo piloto le dijo que el avión tenía problemas técnicos.

Las televisiones locales mostraron una capa espesa de humo blanco sobre una zona de casas densamente poblada, mientras los bomberos combatían llamas entre escombros.

Una casa se quemó del todo y otra resultó seriamente dañada, según los bomberos de San Diego.