Un muerto y más de una decena de heridos, algunos de ellos de bala, fue el saldo del feroz enfrentamiento entre las facciones del gremio que agrupa a los trabajadores lecheros en Rosario, dos semanas después del violento choque entre petroleros en La Pampa que causó otro deceso.

Ariel Chávez, secretario adjunto de la seccional del gremio lechero, afirmó que el secretario general de la CGT, Hugo Moyano "no tuvo nada que ver" con el violento enfrentamiento de ayer entre dos facciones de ese sindicato, en el que murió un trabajador y dos resultaron gravemente heridos.

"Lamentamos verdaderamente todo lo sucedido pero queremos dejar en claro que esto lo habíamos previsto por eso habíamos hecho la denuncia para evitarlo", dijo el dirigente en diálogo con radio 10.

En cuanto a las responsabilidades, culpó a Héctor Ponce, secretario general de los trabajadores de la industria lechera y aseguró que "las 800 personas que fueron ayer a enfrentarlos le responden".

Sobre la disputa, sostuvo que "es interna al gremio" y negó que el enfrentamiento tenga algo que ver con que unos pertenecen a la CGT y otros a la CTA.