21 de noviembre de 2024
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Cámaras, GPS y policías para impedir delitos en la Costa
El apoyo tecnológico se complementa con el seguimiento satelital de los patrulleros y más vigilancia en las calles de las playas más visitadas por los turistas
24 de noviembre de 2008
Quienes montan el sistema de cámaras de seguimiento hasta alardean de la capacidad del circuito: "Cuando ingrese a este partido un auto con pedido de captura, las cámaras lo detectarán, se dará aviso a los móviles policiales y el vehículo en cuestión será rápidamente interceptado", explica Fernando Miner, director de seguridad de Pinamar. Va más allá: "Trabajamos con una base de datos que puede determinar, incluso, si los coches mantienen deudas de patente".
Este plan Gran Hermano (por aquella vigilancia agobiante que había en "1984", la famosa novela de George Orwell) ya está en marcha y se están montando cámaras (en principio serán 35, a un costo de 200 mil dólares) en los accesos a Pinamar, Valeria del Mar, Ostende y al bosque de Cariló. El resto se distribuirá en puntos "calientes", como la zona del Golf de Pinamar, donde en los últimos veranos hubo varios robos violentos. Sólo de la Policía Bonaerense, en Pinamar y sus playas vecinas habrá 600 agentes. Es que en Pinamar y Cariló, durante el verano pasado se registró una ola de robos de alto impacto, a pesar de que no se divulgaron estadísticas oficiales. En el resto de las ciudades balnearias, excepto en Mar del Plata, también habrá cámaras.
El Partido de la Costa las tendrá en los accesos de cada una de sus trece localidades. La sala de situación estará en Mar del Tuyú. Tiene 20 monitores de LCD, dos pantallas de plasma y una mesa de contingencia desde donde decidirán qué hacer ante una crisis.
Más allá del entusiasmo de las autoridades por los chiches tecnológicos, los vecinos prefieren la cautela. "Parecería que aquí no pasa nada, pero no es así. Por ahora la batalla la van ganando los ladrones y hay que seguir trabajando para revertir la situación", dijo Rubén Rinaldi, dueño de un supermercado de Mar del Tuyú que en marzo de 2005 perdió a su hijo de 26 años en un asalto. "Todo lo que se está haciendo está bien -dice el vecino, ex titular del foro de seguridad local-, pero siempre falta".
En Villa Gesell, este verano las cámaras estarán en los accesos de la ruta Interbalnearia, en Mar Azul y en Mar de las Pampas. El capitán Claudio Gómez, que recién asumió en la villa, pidió al Ministerio de Seguridad bonaerense contar con una dotación de 500 hombres, la misma cantidad que trabajó el verano pasado. La diferencia estará en un equipo táctico del Grupo Halcón que hará base en Mar de las Pampas, un lugar castigado por el saqueo de las casas de veraneo.
En Cariló, por primera vez, actuará el Grupo Halcón ante un eventual toma de rehenes o cualquier ataque violento, y no perderán de vista el bosque ni siquiera en las noches: usarán sistemas de visión nocturna, infrarrojos.
La Policía en Villa Gesell tendrá un rol activo en apoyo de los operativos de "nocturnidad" (por ejemplo, venta de alcohol a menores de edad) y pondrá el foco en las bandas de otros distritos que llegan para asaltar turistas. "El año pasado dimos con dos grupos, armados fuertemente, que venían de asentamientos del conurbano bonaerense para hacerse la temporada", señaló Gómez.
Mar del Plata, igual que Villa Gesell, adelantará el inicio del Operativo Sol. El jefe de la Policía marplatense, Norberto García, asegura que comenzará el 28 de diciembre y no el 2 de enero, como en los últimos años. "Las partidas de Infantería y Caballería llegarán el 15 de diciembre, mientras que el personal estable de Mar del plata sumará horas adicionales de trabajo. Cuando lleguen los turistas, el operativo ya estará en marcha", dijo. En total, en plena temporada de verano, en Mar del Plata circularán 800 efectivos policiales.
Los que caminen las playas lo harán de bermudas y zapatillas para disuadir a arrebatadores. También continuarán los bicipolicías en los lugares de mayor concentración de gente, como las calles del Centro y la calle Güemes, o en la larga de pasarela de los balnearios de Punta Mogotes.
La Policía marplatense continuará junto a la comuna trabajando en los operativos de alcoholemia. Los jefes de la Policía Bonaerense entienden que el tiempo de respuesta se reducirá notablemente a partir del uso de GPS en los patrulleros, por el cual se puede determinar la ubicación exacta de los coches.
En Mar del Plata recién comienza a utilizarse esta tecnología, que también permite controlar a los propios policías. Todo queda registrado. Igual que con las cámaras, que permiten ver lo que ocurrió hasta 30 días atrás.