El secretario de Transporte dijo que "no hay argumento para rechazar la expropiación", al justifica esa recomendación por parte de la Comisión Bicameral del Congreso
El secretario de Transporte, Ricardo Jaime, consideró hoy que "no hay ningún tipo de argumento" para rechazar la expropiación de Aerolíneas Argentinas y Austral, determinada por la Comisión Bicameral de Seguimiento de las Privatizaciones, y calificó como "una falta de respeto, una incoherencia absoluta", la conducta del Grupo Marsans durante el proceso.
"El único tipo de argumento sólido es mantener la interconexión del país con Aerolíneas y Austral", subrayó Jaime a radio América. Explicó que "lo que va a hacer el Congreso es iniciar el proceso de expropiación a través de la presentación de un proyecto de ley", según reprodujo el diario La Nación.
La expropiación se determinó anoche de manera sorpresiva: la Comisión había escuchado al presidente de Aerolíneas, Horacio Fargosi, quien solicitó un cuarto intermedio en el proceso, que le fue concedido.
Pero tras la salida de Fargosi, se descubrió que había dejado una papel firmado por los apoderados Eduardo Unzurunzaga y Vicente Muñoz, donde expresaban que no aceptan "bajo ninguna circunstancia que el valor de la empresa sea cero o menos de cero", y que no venderán las acciones al precio establecido por el Tribunal de Tasación, al tiempo que reivindicaron la valuación del Credit Suisse y propusieron un tercer tasador.
Jaime señaló que "entonces la Comisión no entendió para qué iba a dar el receso y resolvió" recomendar la expropiación de la compañía. Remarcó que "hay tres trabajos importantísimos realizados por el Tribunal de Tasación, la AGN y la UBA, que llevan a determinar que el precio de las acciones de ambas empresas es cero, habida cuenta del patrimonio neto negativo".
Además, destacó que los hombres de Marsans "ni siquiera se presentaron a defender la valuación que habían realizado, absolutamente deficiente a partir de experiencias contradictorias, y sin ningún viso de seriedad".
Consultado sobre si la expropiación puede significar problemas o tensión a nivel internacional, el funcionario contestó que "no", porque subrayó que "se ha cumplido con todas las etapas correspondientes" al proceso de negociación del traspaso de Aerolíneas al Estado.
En ese sentido, señaló que "el Congreso trabajó en una ley y así la aprobó y dio todas las instancias necesarias a través de la Bicameral, la AGN, el Tribunal y la Universidad, que hicieron un relevamiento sobre cuál es el patrimonio de ambas empresas".
En cambio, puntualizó que "el grupo Marsans nunca pudo determinar cómo llegó a un resultado tan dispar, salvo que haya otro tipo de intencionalidad, como el vaciamiento de Aerolíneas".